Nerea Barros (Santiago de Compostela, 1981) se ha alzado hoy con el Goya a la mejor actriz revelación por su papel en "La isla mínima", de Alberto Rodríguez.
"No me lo esperaba en absoluto", ha dicho una emocionadísima Barros, que no ha podido contener las lágrimas al recoger el premio de manos del modelo Andrés Velencoso y el actor Antonio Velázquez.
Aunque en un primer instante no ha podido ni articular palabra, la actriz se ha rehecho para agradecer a todos este premio.
"Muchísimas gracias a cada uno de los miembros de la academia por darme este reconocimiento tan maravilloso y estas semanas tan increíbles", dijo Barros, antes de decir que el premio es también de las otras tres nominadas.
Barros se ha impuesto a Natalia Tena por "10.000 km", a Yolanda Ramos por "Carmina y amén" y a Ingrid García-Jonsson por "Hermosa Juventud", que también competían por el mismo galardón.
También ha querido dedicárselo a sus compañeros de reparto, Javier Gutiérrez, Raúl Arévalo y Antonio de la Torre. "Os quiero muchísimo", a cada uno de los miembros de "La isla mínima", a sus padres -"son lo más maravilloso que tengo"- a todas las mujeres que son madres -"sois unas heroínas"- y a Galicia -a miña terra-.
"¡Viva el cine español y viva el público español!" exclamó la actriz, que destacó que el cine ha roto una distancia que tenía con su público.
En "La isla mínima" interpreta a la madre de unas adolescentes desaparecidas, el caso que investigan Javier Gutiérrez y Raúl Arévalo, y es la esposa de Antonio de la Torre.
Barros debutó en el cine a los quince años en la película "Nena", de Xabier Bermúdez. Durante un tiempo compaginó los estudios de Enfermería con el teatro, antes de trasladarse a Madrid, donde consiguió un papel en la serie "El tiempo entre costuras".