El presidente de CEOE, Juan Rosell, ha asegurado este miércoles que España necesita un "nuevo y largo periodo de crecimiento" y las empresas "como mínimo un par de lustros" para recuperarse, ya que "con un par de años (de crecimiento) no es suficiente", al tiempo que ha advertido de que si no continúan las reformas se podría volver a caer en el "declive".
Así lo ha señalado Rosell durante la clausura de la Asamblea General 2016 de la patronal, a la que también asistieron el Rey Felipe VI, la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, el presidente del BBVA, Francisco González, y el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, entre otros.
Rosell ha valorado que España acumula dos años consecutivos de crecimiento del PIB y de empleo, con casi un millón de puestos de trabajo creados, y registra cifras positivas en exportaciones e inversiones, lo que supone un "buen presagio de que las cosas están en la buena dirección" en un momento en el que ya se constata una "tendencia positiva en la microeconomía, en el día a día".
No obstante, ha matizado que hay "bases económicas negativas a compensar por las empresas" ya que "la historia reciente de las empresas ha sido de pérdidas", por lo que ha subrayado que para el entramado empresarial español es necesario un "nuevo y largo periodo de crecimiento". "Con un par de años no es suficiente, nos hacen falta como mínimo un par de lustros", ha enfatizado.
LA IMPORTANCIA DE REDUCIR EL DÉFICIT
En este sentido, ha incidido en la importancia de combatir la economía sumergida e intentar "por todos los medios" que el déficit vaya reduciéndose, ya que "el endeudamiento nos puede lastrar la economía en el futuro", al tiempo que ha remarcado que España no ha "aprovechado" del todo los "vientos de cola" que, a la postre, "no serán eternos". De éstos ha citado el precio del petróleo, que ha augurado que se situará entre los 50 y los 60 dólares en los próximos meses, y la relación "favorable" del dólar y el euro.
"La sociedad española ha hecho una gran transformación en positivo", ha apostillado Rosell, quien ha abogado por "reformar, adaptar, digitalizar unas estructuras acordes con los tiempos que vivimos y entre todas ellas, la estructura del Estado y la tecnoestructura que está desfasada". "Es incómodo, afecta a las personas, a los hábitos, pero es imprescindible. Nos está costando, pero lo estamos haciendo", ha reconocido.
"NO PUEDE ADMITIRSE EL DESPILFARRO CONSENTIDO"
En clave interna, Rosell ha destacado que la patronal ha culminado su proceso de transformación, que "no ha sido fácil" pero que ha supuesto la simplificación de estructuras y la introducción de cambios tecnológicos.
Además, ha valorado el "gran esfuerzo" para conseguir unas finanzas "equilibradas", y ha abogado por mayor "transparencia y honestidad", por lo que ha remarcado que el código ético de CEOE "no debe ser un simple título para que dar bien".
LA DIFICULTAD DE FORMAR GOBIERNO
A nivel político, Rosell ha dicho esperar que la actual aritmética "más complicada", ante la falta de pactos para formar Gobierno, se resuelva "cuanto antes", si bien ha puntualizado que "es fácil dar consejos, pero no tenemos soluciones milagrosas", por lo que ha apostado por depositar la "confianza" en que los partidos tengan un resultado "cuanto antes mejor".
El presidente de CEOE ha marcado a los partidos lo que a su juicio debe ser la hoja de ruta a seguir por el Gobierno que finalmente se forme en la próxima legislatura, en la que considera que se tendrán que reforzar las instituciones y abordar la "necesaria regeneración sin ningún tipo de complejos".
Entre las "tareas pendientes" de futuro, Rosell se ha referido a la reestructuración del Estado de las autonomías para que sea más "eficaz", teniendo claro que el "margen de maniobra" se encuentra en el gasto en Sanidad, Educación y Servicios Sociales, que representan el 70% del gasto autonómico. "Tenemos que ser conscientes de que hay que solucionarlo", ha insistido, para apuntar a continuación que "hay que lograr un Gobierno, no más grande, sino mejor", que controle el gasto público.
"No puede admitirse el despilfarro consentido", ha sentenciado. En cualquier caso, ha señalado que no se puede "dejar a la gente en la cuneta de ninguna de las maneras", por lo que ha pedido un "consenso generalizado" para abordar asuntos como el de las pensiones.
SIN REFORMAS ESPAÑA IRÁ EN DECLIVE
A su juicio, sin reformas España caerá en el "declive", mientras que si continúa el proceso reformista España podrá ganar "competitividad, crear empresas y empleo", algo relevante porque "a pesar de los buenos datos económicos de los últimos años, queda mucho camino".
"El desempleo y la deuda son los únicos agujeros de la economía española; sólo se soluciona con las empresas, con más competitividad y un marco proclive al mundo empresarial". "Cuando la mayoría de los ciudadanos entiendan que la economía funciona cuando lo hacen las empresas, empezaremos a tener más prosperidad. Los empresarios vamos a estar ahí", ha concluido.
