La Delegación Provincial de Medio Ambiente aclaró ayer a Ecologistas en Acción que el arroyo del río Salado, que discurre entre los términos municipales de Rota y El Puerto, en el que se están acometiendo obras “no es un arroyo natural, sino artificial”, así como que dichas obras se deben a tareas de limpieza a petición de los propietarios de las fincas colindantes, todos agricultores.
El arroyo es un cauce artificial que se realizó hace 25 años por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir tras un expediente de expropiación para que funcionase como desagüe de la zona regable de la costa noroeste. A petición de los colindantes, todos terrenos agrícolas, al inundarse por la acumulación en el fondo de cañas y lodo, lo que se está haciendo es sacar ese lodo para que no se inunden los terrenos agrícolas de al lado.
Ecologistas en Acción anunció horas antes la presentación de una denuncia dirigida a la delegada provincial de Medio Ambiente, Gemma Araujo, por la “destrucción” del río Salado, provocada, dice, por obras de la propia Agencia Andaluza del Agua, el organismo responsable de la gestión y conservación de los ríos.
Según los ecologistas, con la actuación de la Agencia “se está procediendo a la destrucción de toda la vegetación de ribera y a artificializar el cauce, convirtiéndolo en un canal”. Por ello, solicitan la paralización “inmediata” de estas obras, así como que se les remita información y documentación sobre los objetivos de la actuación y los estudios realizados.