Ai-Pro ha analizado la última reunión de la ejecutiva del partido, con lo que simbólicamente inaugura el nuevo curso político. En nombre de la formación que cogobierna el Ayuntamiento, su portavoz, Domingo Ruiz, señaló que el nuevo periodo de trabajo está marcado por “el aliciente” que le supone la celebración de las elecciones municipales del próximo 24 de mayo.
Así, manifestó que como primer reto se marca ganar esos comicios, no exentos de dificultades, pero con la mayor “humildad” posible. Asimismo, reconoció que es preciso, si cabe, un mayor esfuerzo para estar más cerca del ciudadano.


Durante la reunión de la ejecutiva se elaboró un informe que recoge los nombres de los integrantes de Ai-Pro que se responsabilizarán de la campaña electoral, además de haberse diseñado un calendario de acción política claramente dividido en dos fases: una de aquí a finales de año y otra desde principios de 2015 hasta las elecciones, en la que el partido irá desarrollando su estrategia y, en el caso de la primera fase, experimentando nuevas acciones.


Sin embargo, Ruiz habló de escollos, comenzando por la propia competencia del resto de partidos políticos. Además, valorando el pacto de gobierno con el PP, aseguró que desde Ai-Pro están muy satisfechos.


A este respecto, declaró que gracias al pacto la ciudad ha gozado de un periodo de estabilidad política, además de criticar la política del primer grupo en la oposición. En el terreno laboral, aseguró que las competencias sobre el empleo público son de la Junta y que su partido sólo hace "lo que puede" desde la institución municipal, en alusión a los contratos que ofrece el Ayuntamiento.
Como otro posible escollo para Ai-Pro, se encuentra la reforma electoral que plantea el PP, la cual no comparte su socio de gobierno en Arcos, que considera que el partido que gobierna el Estado se ha diseñado un traje a su medida pensando en sus intereses.


De ahí, Ruiz Albertos pidió al PP una reflexión y que traslade su propuesta de reforma de la ley electoral a su próximo programa electoral y no lo imponga al conjunto de los partidos y al sistema político.