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El Arcos afronta el domingo el primero de sus tres retos

Si puntúa en Las Cabezas se metería en la promoción por segunda vez en su historia. Si consigue como mínimo la segunda plaza liguera jugaría la Copa del Rey

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  • El Arcos juega en Las Cabezas. -

Por diversos motivos, se avecina una recta final de liga apasionante para el Arcos C.F. Es el tiempo de recoger los frutos de una campaña fantástica en la que el equipo que entrena José Manuel Pérez Herrera ha venido ocupando las primeras posiciones del grupo décimo de la Tercera División y, en su caso, siendo líder de la competición más de la mitad de las jornadas que se llevan disputadas, faltando solo cuatro para concluir la temporada en su fase regular.

En esta privilegiada situación que ahora ocupan, primeros de la tabla empatados a 69 puntos con el filial del Real Betis Balompié, los arcenses ya han batido el récord de puntos en Tercera que había establecido el Arcos de la temporada 2005-06, que sumó 63 puntos en 38 jornadas, pero con la ventaja de que lo han superado quedando aún 12 puntos por jugarse, seis de ellos en el Antonio Barbadillo, que se ha mostrado la presente temporada como el mejor aliado de los blancos.

El Arcos es el mejor equipo en casa de la liga, habiendo logrado 13 victorias, 4 empates y cero derrotas, siendo el único conjunto del grupo que todavía no ha perdido en su feudo, donde es el máximo goleador (45 tantos) y el menos goleado (nueve tantos). En sus desplazamientos, los arcenses han conseguido siete triunfos y cinco igualadas y han caído derrotados en otras cinco ocasiones (Antoniano, Sevilla C, Los Barrios, San Roque de Lepe y Gerena), sus únicas cinco derrotas de la temporada, por siete de Betis B y Algeciras y ocho del Écija, a los que aún debe enfrentarse en un final de liga que deparará, sin duda, fuertes emociones.

Lo que sí parece estar al alcance de la mano de la escuadra arcense es volver a reeditar la disputa de una promoción de ascenso a Segunda B, el hito deportivo más alto jamás conseguido por el club del Barbadillo en aquella legendaria campaña del 2005-05 a las órdenes del maño Ángel Oliva Beltrán, para lo que solo tendría que sumar un punto en las cuatro jornadas que quedan, hazaña que podría quedar certificada este próximo domingo en el estadio Carlos Marchena de Las Cabezas de San Juan a partir de las 11:30 h frente al C.D. Cabecense, un rival que no se le da nada bien a los nuestros puesto que en sus últimas cinco visitas a la población sevillana perdió en cuatro de ellas y empató en otra, un bagaje bastante pobre y que indica la dificultad de los blancos para arañar puntos en un escenario adverso en el que no parece encontrarse muy a gusto. Pero el Arcos de esta temporada ha roto ya varios maleficios demostrando su gran nivel competitivo, lo que le hace ser el mejor Arcos de toda su historia, en la que nunca había peleado por la primera posición de la tabla mostrándose como un favorito indudable a conseguir el campeonato.
Otro de los objetivos álgidos que se pueden conseguir esta temporada es la clasificación para jugar la próxima campaña la Copa del Rey, un logro descomunal para un club que casi siempre ha peleado por objetivos menos ambiciosos como, por ejemplo, evitar el descenso de categoría. Para ello, tendría que acabar como mínimo en segundo lugar de la tabla, siempre que el campeón sea el filial verdiblanco, que no podría competir en un torneo en el que su equipo matriz, el Real Betis Balompié, tiene prioridad absoluta obligado por el reglamento de competiciones de la Federación Española de Fútbol, que no permite inscribirse en la misma competición a dos equipos de la misma entidad deportiva.

Por supuesto que si el Arcos se proclamase campeón de liga de Tercera División por primera vez en su historia, su derecho a jugar la Copa del Rey sería automático, circunstancia que daría paso a un situación inédita y desconocida hasta el momento, un logro sencillamente espectacular y absolutamente nuevo en los anales del club.

En definitiva, estamos ante un final de competición que puede aportar lo más brillante y meritorio que nunca antes se haya conseguido en la localidad serrana, una oportunidad excepcional para disfrutar del gran trabajo realizado a lo largo de una temporada sin parangón en la historia del club de la ciudad monumental.

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