India Gutiérrez presentó “El libro de los Secretos del cuerpo Flamenco”.
La autora de la obra, original, didáctica y terapéutica que ayudará a los aficionados y profesionales del baile flamenco, habla en exclusiva para Andalucía Información, Viva Sevilla y Cádiz Suena Bien.
Has publicado “El libro de los Secretos del cuerpo Flamenco”. ¿Qué has querido contar en esta publicación? ¿Cuáles son esos secretos?
Tal vez, lo que he querido contar es que no está todo dicho sobre el baile flamenco, y que aún, falta dar lugar al cuerpo como instrumento creador de arte y vida. Dar voz a la demanda dolorosa de quienes se han acercado a mi trabajo, todos estos años, con una queja en común: “no expreso todo lo que siento al bailar” fue la motivación fundamental de este libro. Para quienes la solución fue mirar dentro de su historia emocional y no en ensayar más duro.
¿Cuál es “El Secreto"? Solo uno. Es evidente y está disponible para todo ser vivo. El Secreto es algo sagrado que todos tenemos: el cuerpo.
Hellinguer dice: “lo que es imprescindible para la vida es sagrado”. Volver al cuerpo es algo que necesitamos hacer para todos los aspectos de la vida; bailar flamenco es solo uno de ellos y, al mismo tiempo, un camino de conexión con lo sagrado, válido para todas las personas movidas por la pasión flamenca.
Se presentó recientemente en la Facultad de Psicología de la Universidad de Sevilla junto al crítico flamenco Kiko Valle. ¿Cómo fue el acto y que aportó Kiko Valle?
Fue una gran validación para “El libro de los Secretos del cuerpo Flamenco” que, la Facultad de Psicología de la Universidad de Sevilla, le abriera sus puertas. Desde mi punto de vista y experiencia el baile se aprende, como se ha hecho hasta ahora, pero, también se procesa emocionalmente. Por eso no hablo de enseñar a bailar sino de “acompañar el proceso del baile” integrando a la técnica y al montaje las sensaciones del cuerpo, las emociones del alma y las circunstancias de quien baila.
Kiko Valle me acompañó en la presentación el pasado 9 de abril, no solo por su conocimiento y afición flamenca sino por su especialización en la crianza consciente. Él y yo coincidimos y resonamos en que “lo consciente” nos lleva por distintos caminos al mismo sitio, en consecuencia, fue una reunión muy cercana entre nosotros y con el público. Todos los presentes, guiados por mí en algunas de las dinámicas corporales que el libro expone, pudieron explorar cuáles son algunas de estas sensaciones que busca la TCC (Técnica Corporal Consciente para el baile flamenco y la Vida).
Me he sentido muy agradecida por la participación activa del público, entre los cuales había compañeros interesados en mi propuesta formativa, amigos, alumnos que, desde distintas partes del mundo, se hicieron presentes con su apoyo y nuestros hijos.
Un libro que pretende ayudar a las personas que se inician en el baile, pero; ¿puede ser también interesante para los y las profesionales del arte flamenco?
La metodología FlamenConsciente®, descrita y desarrollada en este libro, es para cualquier estudiante o profesional que quiera hacer una investigación sobre su cuerpo para el baile flamenco u otras danzas.
El proceso del baile es una nueva mirada a lo que le ocurre tanto al estudiante como al profesional con su cuerpo como identidad. Cómo se vive ese encuentro con el baile es también como vivimos nuestra vida. Para muchos bailaores profesionales es una gran apertura a un lugar desconocido que puede brindarle muchísimos recursos inexplorados artísticos y de sanación.
¿Hasta qué punto el baile flamenco puede ayudar al equilibrio entre cuerpo y mente?
El baile flamenco ayuda a la polarización entre el cuerpo y la mente cuando se lo enseña solo desde el enfoque artístico. Yo misma bailé mucho tiempo en la mente, en los tiempos y en la mínima fracción del contratiempo para sacar un sonido difícil de ejecutar. Los maravillosos recursos del baile flamenco son exigentes hasta el exilio, hacen que las personas, en busca de algo especial, de lo snob o del diferenciarse se alejen cada vez más de sí, de quienes son, qué sienten, dónde lo sienten, cuándo sienten lo que sienten, qué motiva eso que sienten. Por eso, mi propuesta es un baile flamenco consciente que encuentre en estas preguntas una vuelta a casa: al cuerpo. La respiración consciente es una de las diez premisas de la TCC y base fundamental de estos secretos que integran cuerpo, emoción y espíritu en la unidad que somos y donde tenemos todo lo que buscamos, pero ese es un viaje que cada uno debe transitar y este libro puede ser un muy buen mapa.
Encontraste el flamenco por las calles de tu ciudad natal, La Plata, en Buenos Aires (Argentina) ¿Qué nos puedes contar de este “flechazo” y cómo cambió tu vida adentrarte en los secretos de este arte?
Siempre he sido muy intuitiva. La historia se forjó cuando tenía seis años. Yo jugaba con dos amigas del barrio Silvita y Okita, pero un día no salían a jugar (antes se jugaba con libertad en las calles) porque iban a un lugar que parecía muy interesante puesto que llevaban faldas largas, tacones y una bolsa que hacía ruido (las castañuelas) .Le dije a mi madre: “yo quiero ir con ellas”. Recuerdo ese momento perfectamente, en mi imaginario, surge atravesado por un rayo de sol.
Ese momento marcó mi camino. Todas las decisiones de mi vida fueron siempre mirando al flamenco. El flamenco fue mi compañero y mi maestro al cual ahora, en honra y agradecimiento, me pongo ayudando a sanar el baile de quienes lo necesiten, desde el marco terapéutico
Háblanos de tu experiencia en el flamenco activo y tu posterior paso a la faceta docente.
La primera vez que pisé Sevilla, allá por 1999, conocí a Concha Vargas donde escuché por primera vez, en sus clases, el cante y la guitarra en directo. Luego de tirarme una temporada, El Pola, me invitó a bailar en La Carbonería; fue mi primera vez por Soleá. No tengo palabras para describir ese momento expansivo de mi vida, puesto que no era muy común ni fácil, como ahora, vivir esa experiencia como extranjera.
Hubo muchos momentos que yo viví como extraordinarios y con agradecimiento: dar mis primeras clases para principiantes en el estudio de Juana Amaya, cuando me invitaron a ser socia de la Peña Niño de la Alfalfa y, además, me propusieron bailar y dar clases allí, bailar al cante de los cantaores que admiraba…Eventos inimaginables para alguien que venía de fuera, nunca me hicieron sentir ni guiri ni incómoda, siempre fui muy bien acogida y respetada. Di clases en la peña desde el 2011 hasta que se cerró en el 2017, allí me di cuenta que podía aportar algo que yo, como alumna, no había encontrado: explicaciones didácticas del montaje y comunicación con los músicos -ahora se le llama a eso “recursos de tablao”- y una forma de hacer la técnica basada en sensaciones a la que yo llamo TCC (Técnica Corporal Consciente). Todo ese tiempo enseñando de lunes a jueves en la peña de los Corralones de Artesanos del barrio de la Macarena de Sevilla, fue mi laboratorio de investigación y práctica de lo que hoy es la metodología registrada FlamenConsciente®.
¿Qué consejo le enviarías a los futuros lectores del libro para que les ayude a adentrarse en estos secretos y les produzcan sensaciones positivas?
Querido lector, te prometo que El libro de los Secretos del cuerpo Flamenco te descubrirá un mundo. Al mismo tiempo, debo advertirte que toda transformación viene desde dentro, de tu trabajo y compromiso. El único botón mágico está en ti. Si abres con cuidado estas páginas, con lentitud y respeto a tu proceso, encontrarás un mapa y una guía.
Te propongo dar una primera lectura para entrar en tema. La segunda vez que lo leas sabrás cuando comienzas, pero no cuando lo terminarás. Experimenta con tu cuerpo cada palabra que describe cada ejercicio. Dedícale al proceso al menos un año y medio. Lleva un diario de tus logros, frustraciones y lo que te va sucediendo. Deja un testigo por escrito de quien eras antes de comenzar. Al finalizar el libro y el proceso, algo habrá cambiado en ti. Comprobarás tu poder personal, el poder de transformarte para tu baile y para tu vida.
Con todo mi corazón espero que me lo cuentes algún día.