Los veterinarios son los únicos profesionales sanitarios con la correspondiente capacitación para ofrecer tratamiento a los animales en casos de enfermedades y patologías. Ello se debe a su formación. Son quienes tienen los más extensos y necesarios conocimientos para tratar y prevenir las enfermedades en los animales. Conocen la dosis que es correcta en cada caso y las diferencias que puede haber según la especie e incluso, la raza.
Partiendo de este razonamiento, la Junta de Gobierno del Ilustre Colegio de Veterinarios de Cádiz -Colvet Cádiz-, celebró el pasado 14 de octubre una sesión extraordinaria donde se tomaron una serie de decisionestras analizarlas y debatirlas en profundidad. Colvet Cádiz se posiciona junto a la Organización Colegial y los diversos colectivos veterinarios y suscriben el manifiesto veterinario publicado en la web medicamentoveterinario.org, un nuevo documento relacionado con la dispensación de medicamentos por parte de los veterinarios.
Igualmente, estudian otras acciones, como una iniciativa popular para el cambio de legislación que desemboque en la tan necesaria cordura en los tratamientos de animales, tal y como se hace en el resto de países de Europa.
El Reglamento de la UE 2019/6, en su considerando 47 reconoce a los veterinarios “su legítima actividad de venta al por menor” de los medicamentos veterinarios en toda la Unión. Además, el Tribunal de Justicia de la UE, en sentencia de 1 de marzo de 2018, aclara: “los veterinarios titulares del capital de un establecimiento que comercializa al por menor medicamentos veterinarios, a diferencia de los agentes económicos que no son veterinarios, están sujetos a normas deontológicas que tienen por objeto moderar su ánimo de lucro, de manera que su interés en la obtención de beneficios pueda verse mitigado por la responsabilidad que les incumbe”, reza el texto.
Los veterinariosreciben durante sus estudios formación en principios generales de farmacocinética y farmacodinamia; descripción fundamental de los principales grupos farmacológicos; estudio de las formas farmacéuticas y sus aplicaciones farmacocinéticas; mecanismos de acción; efectos farmacológicos y sus consecuencias terapéuticas y tóxicas y farmacoterapia en materia de farmacología, farmacia y terapéutica. Tienen la obligación de conocer todo acerca de los fármacos que usan diariamente, sus efectos, interacciones, su modo de conservación o administración.
Insistiendo de nuevo en la premisa de que el veterinario es el profesional licenciado con más conocimiento sobre medicina y farmacología veterinaria, Colvet Cádiz deja patentes una serie de consideraciones que legitiman dicho planteamiento frente a otras opciones.
Colvet Cádiz hace hincapié en que el uso racional del medicamento veterinario es algo esencial también para preservar la salud de las personas- “la salud de los animales, la salud de las personas”, lema de la profesión-. Y el veterinario es quien tiene exclusivamente los conocimientos necesarios para este objetivo. Un antiinflamatorio puede ser letal si se usa sin los conocimientos adecuados. El uso racional de los antibióticos en animales es necesario para la salud humana, animal y medioambiental, y sólo el veterinario tiene los conocimientos necesarios para el mismo. Esto es sólo un ejemplo, la punta del iceberg, entre las competencias profesionales que atesora el veterinario a la hora de dispensar los medicamentos para los animales.
El interés mundial por mejorar los mecanismos de atención y tratamiento de los animales es unánime ya sea para las mascotas como para los animales productores de alimentos y ello debe llevar implícito tanto una disminución como la utilización racional de los medicamentos veterinarios por la salud de los animales, por la salud pública y por la del medio ambiente.
Pero por encima de todo, porque es muy necesario para la profesión veterinaria y sus profesionales, concluyen desde Colvet Cádiz.