El Ayuntamiento de Cádiz informó este domingo por medio de una nota de prensa de que en los próximos días finalizará el trabajo de desmontaje de todas las obras que han lucido en las calles de la ciudad durante la celebración de la primera edición de ‘Orgullos@s de nuestra historia’ dedicadas a la época fenicia de la ciudad, y que estas quedarán almacenadas en los depósitos de tabaco a la espera de la apertura de una exposición permanente donde se puedan contemplar las creaciones realizadas para esta celebración.
El comunicado no es casual. El festival continúa bajo la lupa de la oposición, que a iniciativa del PSOE, también protagonizó un agrio debate en el último Pleno municipal con la delegada de Cultura, Maite González. Y el equipo de Gobierno quiere remarcar lo positivo de la iniciativa pionera para la puesta en valor de la historia de la ciudad.
El portavoz municipal socialista requirió, como adelantó que haría a principios de la semana pasada, información pormenorizada, “al céntimo”, sobre la inversión llevada a cabo.
La concejala de Cultura, Maite González, aportó algunas cifras que, como hizo saber Óscar Torres, no coincidían con las que se dieron inicialmente. Si había dicho ante los medios días atrás que los recursos destinados a Cádiz Fenicia ascendían a unos 350.000 euros, el jueves aportó cifras que daban como resultado casi 460.000 euros.
González sembró, por lo tanto, dudas en torno al importe total, algo que el Ayuntamiento aclarará con un balance definitivo, según se comprometió en el Pleno.
Pero también quiso dar por zanjada la polémica sobre lo que Adelante Izquierda Gaditana considera “ninguneo a artistas y empresas locales”. La concejala apuntó que estos se beneficiaron directamente con 70.000 euros de los 170.000 que costó el espectáculo de la Fura del Baus en La Caleta y con otros contratos por valor de 200.000 euros.
En cuanto a los encargos de las esculturas de Puertas de Tierra y Plaza de San Antonio al valenciano Alejandro Santaeulalia, por 88.000 euros, defendió que los artesanos locales también tuvieron protagonismo.
“Dos”, replicó Lola Cazalilla, de Adelante Izquierda Gaditana, quien aprovechó para afearle igualmente que no involucrara a la Universidad de Cádiz (UCA) para dar rigor a los contenidos y resumir la primera edición del festival como “fracaso” por “una gestión bochornosa”, poniendo de ejemplo el pasacalles inaugural.
La responsable de Cultura defendió la organización con los consabidos argumentos de participación, 45.000 visitas, y la recuperación de espacios como Entrecatedrales o el Castillo de Santa Catalina. Y reprochó a Cazalilla que tuvo la oportunidad de haber puesto en marcha iniciativas como esta cuando gobernó, pero “solo puso en la calle el oso con el cuello ‘doblao”.