El presidente del Partido Conservador británico, Nadhim Zahawi, fue despedido ayer a raíz de la investigación llevada a cabo por el asesor de ética independiente del primer ministro, Rishi Sunak, que habría descubierto que Zahawi violó el código ministerial con sus asuntos fiscales.
Según desvela ‘El Confidencial’, el presidene de los ‘tories’ llevaba “varios días en el punto de mira” después de que el pasado lunes admitiese que, en su etapa de dos meses al frente del Ministerio del Tesoro, se vio obligado a abonar al fisco 5,6 millones de libras de una fectura de impuestos que estaba relacionada con la venta de acciones de una compañía demoscópica que fundó, YouGov.
El rotativo destaca que un 42,5% de esas acciones estaban a nombre del padre de Zahawi y eran propiedad de una compañía registrada en el Peñón, Balshore Investments.
Zahawi había explicado –continúa El Confidencial- que la Hacienda británica aceptó que su padre tuviera derecho a la propiedad de acciones de fundador de YouGov, si bien “discrepó sobre el modo en que habían sido asignadas”.
La clave del asunto es que, si bien se tomó como “una negligencia” y no “algo deliberado”, la investigación del asesor de ética independiente del primer ministro cree que, “al no declarar la pesquisa en curso de HMRC antes de julio de 2022, el ya expresidente de la formación no cumplió con el requisito del código ministerial de declarar cualquier interés que pudiera dar lugar a un conflicto".
‘El Confidencial’ reflexiona sobre las dudas que deja el caso, de si el fideicomiso controlado por el padre de Zahawi “podría haber un refugio para mantener su dinero alejado del recaudador de impuestos hasta el día en que emigraría a un paraíso fiscal”.