Según explicó la delegada de Urbanismo, Cándida Verdier, la aprobación abre la puerta al desarrollo de 180.000 metros cuadrados en dos promociones urbanísticas cercanas a Novo Sancti Petri, que supondrán la construcción en suelo residencial turístico de 174 y 160 viviendas junto a la vereda de Fuente Amarga y los pinares de La Barrosa. La inversión prevista supera los 6,3 millones de euros para Melilla 1 y los 7,1 millones en el caso de Melilla 2.
Todos los grupos de la oposición dudaron de que los promotores desarrollen los planes parciales aprobados, lo que sirvió para volver sobre la situación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Chiclana. Mientras que la oposición insistió en que “ya van tres” y todos rechazados, la delegada de Urbanismo, como portavoz del Gobierno, aseguró de forma reiterada que “el PGOU está vigente y recurrido al Tribunal Supremo”. Verdier argumentó que “ningún tribunal ha cuestionado la propuesta urbanística” que presenta el PGOU.