La Guardia Civil ha investigado a un vecino de Córdoba capital, de 36 años de edad, como presunto autor de un delito contra la fauna y la flora, tras supuestamente dedicarse a la caza furtiva en la barriada periférica de Santa María de Trassierra.
Tal y como ha indicado la Benemérita en una nota, las investigaciones se iniciaron tras tener conocimiento los agentes el pasado mes de junio del 2022, a través de una denuncia presentada en el Puesto de Córdoba-capital, de que en una finca de caza mayor, ubicada en la barriada de Santa María de Trassierra, se estaban produciendo episodios de furtivismo.
Ante ello, la Guardia Civil, tras comprobar lo denunciado e inspeccionar la zona donde, al parecer, se estaban produciendo, intensificó la vigilancia en las inmediaciones de la citada finca, lo que permitió en fechas recientes localizar e identificar a la persona que presuntamente se estaba dedicando a la caza furtiva en la zona, a pesar de haber intentado huir en una motocicleta cuando fue sorprendido en el interior de la finca realizando un lance de aguardo.
En el momento de ser sorprendido, el sospechoso había acondicionado un puesto de tiro elevado en la arboleda, cebado con un comedero artesanal, compuesto por un tubo de PVC pintado de camuflaje, que hacía las veces de dispensador de comida de maíz para la atracción de los animales, estando incluso el puesto de caza furtiva foto trampeado, con una cámara especial de caza, con el fin de controlar y elegir el animal a abatir.
Finalmente, se pudo identificar al presunto autor de los hechos, procediendo así a su investigación por un supuesto delito contra la fauna y la flora, por cazar sin autorización. El investigado, las diligencias instruidas y las artes intervenidas han sido puestas a disposición de la autoridad judicial.