Había interés en conocer la versión de la primera autoridad municipal respecto a la polémica suscitada en la intención de la Autoridad Portuaria de subastar los terrenos de la margen derecha de La Puntilla.
El silencio que le ha ido acompañando a David de la Encina desde que se conociera la noticia ha sido más que evidente.
La prueba no fue superada en la argumentación realizada en el pasado Pleno del miércoles. Más bien lo contrario, lo expuesto abrió más dudas y más incertidumbre a un tema que se pospone, pero que no se soluciona y que más pronto que tarde reflotará.
Una posición comprometida la que debió lidiar el socialista, defender en dos posiciones dos posturas encontradas y enfrentadas entre sí y que contrasta con la expuesta por todas las formaciones políticas y colectivos sociales que se han mostraron contrarios y meridiano a que no solo se acepte que el ente portuario subaste dichos terrenos, sino que lo siga haciendo con el resto que posee en la población portuense.
David de la Encina llegó a afirmar que la Autoridad Portuaria había “actuado de una manera poca elegante” en la intención de vender un suelo sin el consentimiento del municipio y a espalda de éste.
La moción presentada por el equipo de Gobierno en su punto número 5 no prosperó.
Y es que los números tampoco quisieron estar del lado municipal, que vio que por un exiguo voto se quedó sin aprobar por unanimidad.
De entre las ausencias, destacar la de su propio socio de Gobierno, Antonio Fernández (IU), que enfermo, fue el único que sí se excusó de su falta.
Alfonso Candón, Alejandro Merello, ambos del PP y José Antonio Oliva (Levantemos) tampoco se personaron y marcaron la votación. Once votos contra diez.
La subasta se ha quedado paralizada, que no descartada, en una cuestión en la que solo es ganar tiempo.
Por si hubiera ya pocos elementos opositores, la plataforma ‘La Puntilla tampoco se vende’ hizo acto de presencia en el salón de Plenos.