La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha descatado dimitir pese a la presión política y los ataques de Vox por la ley del 'solo si es si'. "Cuando hay momentos difíciles, tenemos la obligación de dar la cara y demostrar que somos más", ha explicado la titular de Igualdad.
Montero, en una entrevista en TVE recogida por Europa Press, ha reconocido que no ha pensado en irse y ha añadido que, al margen de los ataques personales, el movimiento feminista tiene "la responsabilidad colectiva de demostrar que no hay violencia política capaz de frenar la fuerza del feminismo".
La titular de Igualdad ha admitido que vive "con mucha preocupación la violencia política como estrategia desplegada por la derecha y la extrema derecha", que según ha dicho "no va a parar" y ha expresado que el ataque de Vox, supuso que "el vaso rebosara".
"Antes se habían echado en el vaso muchas gotas, no es un insulto puntual, sino una estrategia continuada y no van a parar porque lo que quieren es frenar los avances feministas", ha añadido Montero.
Asimismo, ha advertido de que "la violencia política es una estrategia continuada por la cual, durante muchos días seguidos, meses, años, se lleva a cabo una estrategia de destrucción personal de la persona y cuando esa estrategia se sostiene desde muchos altavoces y durante mucho tiempo se consigue el objetivo". Ha lamentado, además, la respuesta la PP a los insultos de Vox, al afirmar que "quien siembra vientos recoge tempestades".
Respecto a si se sintió respaldada por el Gobierno ante la bronca política generada por la entrada en vigor de Ley del solo si es si y la rebaja de penas a delincuentes sexuales, ha indicado que ese apoyo "ha sido público y notorio", pero ha precisado que "lo más importante cuando se habla de violencia política es que se pueda traducir en una confianza y determinación política fuerte".