Desde que puso fin a su matrimonio con Marc Anthony, la cantante no solo ha cambiado de vida, sino que también ha cambiado de casa. La también actriz ha comprado una impresionante propiedad en la exclusiva zona de Hamptons, en Nueva York, por la exorbitante suma de 13 millones de euros.

La nueva mansión de Lopez, construida en 2010, tiene cerca de 1.300 metros cuadrados repartidos en tres pisos. Cuenta con un ascensor, siete dormitorios, nueve baños, siete chimeneas, garaje para tres coches, dos salas de lavandería, piscina, y unas fantásticas vistas al mar.

Esta es la segunda propiedad de Jennifer Lopez en Long Island, y según recoge People la mansión es uno de los lugares más lujosos de la zona. La propiedad cuenta con calefacción, suelos de mármol en los baños, un enorme espacio de entretenimiento, y por supuesto, una gran piscina.

Lopez compró la mansión tras haberse separado en julio de Marc Anthony, con quien estuvo casada siete años, aunque ya fue vista en la mansión hace un mes, precisamente junto a Marc y sus hijos, después de que anunciaran la ruptura de su matrimonio.