El consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez Arellano, ha defendido la legalidad "del momento" en la construcción de la biblioteca de la Universidad de Sevilla (US) en el Prado de San Sebastián, así como que la Junta ha pedido el reintegro de la subvención otorgada en su día para esa edificación aludiendo igualmente a la legalidad. Por su parte, el PP-A le ha exigido que se asuman responsabilidades políticas por este asunto.
Ante el Pleno del Parlamento andaluz, a raíz de una pregunta formulada por el diputado del PP-A, Jaime Raynaud, para conocer cuáles han sido los motivos por los que la Consejería de Economía y Conocimiento ha pedido el reintegro de la referida subvención, Ramírez de Arellano ha defendido que siendo vicerrector en 2008 trasladó un proceso "que contó con todas las garantías y requisitos de legalidad", y que ahora, "también en defensa de la legalidad", su Consejería ha procedido al inicio de expediente.
El PP-A, por el contrario, ha discrepado de esa legalidad y ha criticado que el consejero del ramo no ha añadido "nada nuevo" a la comparecencia que realizó en comisión, "cuando trató de enmarcar este tema en un procesos urbanístico en el Ayuntamiento de Sevilla, donde decía usted que había habido muchos intervinientes, y los hubo, pero no todos iguales". "El PP jamás ha estado de acuerdo con construcción de esa biblioteca", ha aseverado Raynaud.
De esta manera, el popular ha afirmado que este "auténtico desatino" tiene que tener responsabilidades políticas, para criticar a Arellano que "ahora que es consejero procede a reclamar el reintegro y cuando era rector no". "Si procede al reintegro, tendrá que haber algún responsable por la mala gestión del proyecto; y si no procede el reintegro, tendrá que haber un responsable por dar una subvención a un proyecto que no se hace", ha indicado.
Para el PP-A, lo ocurrido con la biblioteca del Prado, "es un desatino de principio a fin con nombre y apellido, el PSOE-A".
En su réplica, el consejero ha insistido en "la legalidad del momento" en la construcción del edificio, al tiempo que ha rechazado que el PP diga que siempre ha estado en contra de este proyecto cuando, según ha esgrimido Arellano ante el pleno, "el PP presentó una alegación al PGOU de 2003 en el que proponía la construcción de un edificio cultural en el mismo sitio donde se ubicaba la biblioteca".
Así, el consejero ha reclamado a los populares que busquen "el rigor" y ha criticado que sean "autoindulgente con su responsabilidad en problemas en los que han participado con un papel muy importante".