Los nuevos contagios caen en Galicia pero no la presión en las UCI

Los nuevos contagios del virus causante de la covid-19 caen en Galicia pero no lo hace la presión en las UCIs y este es el contexto en el que el comité clínico que asesora a la Xunta en la gestión de la pandemia celebrará una nueva reunión este lunes, justo dos días antes del plazo de tres semanas de las severas restricciones que entraron en vigor el 27 de enero con el objeto de contener la expansión de la tercera ola.

Según el último parte del Servicio Gallego de Salud, con datos recabados hasta las seis de la tarde del sábado, los casos activos son menos que los registrados hasta la misma hora del viernes (13.745, -1.102) y lo mismo ocurre con los nuevos contagios (419, -87), a la baja desde el pasado miércoles y por primera vez, desde antes de Reyes, por debajo del medio millar.

Con todo, hay ahora mismo un leve repunte en las unidades de críticos, con cuatro ingresados más, hasta los 222 pacientes. Mientras, en las plantas convencionales sí se nota más el alivio, sobre todo desde hace una semana y, en base al último balance divulgado, hay 775 enfermos, ocho menos.

Sumadas ambas cifras, son 997 las personas hospitalizadas, con lo cual este parámetro ha bajado del millar, algo que no ocurría desde el 22 de enero con sus cifras correspondientes, pues entonces eran 825 los ubicados en planta y 142 en terapia intensiva.

El gerente del Sergas, José Flores, ya hizo hincapié esta semana en que pese al acierto, a su juicio, de las medidas de choque, la presión iba "a seguir” por lo que “vamos a continuar una temporada con una situación de carga”.

Los fallecidos suman 2.086, tras los últimos seis decesos comunicados. Las PCR realizadas son 8.095, por las 8.203 del anterior recuento.

Además se han practicado en la última tanda de 24 horas computada 9.849 test serológicos, 1.802 menos.

Hasta la fecha se han contagiado en Galicia por covid-19 un total de 108.241 personas, de las que se han recuperado 92.426.

El acumulado de pruebas PCR realizadas desde el estallido de la crisis sanitaria se eleva a 1.573.165, y el de test serológicos, a 685.514.

Por áreas sanitarias, la caída de los casos activos ha sido generalizada en la última jornada analizada, pero las infecciones diarias han pasado a valores positivos en Vigo y Ferrol.

En el área de A Coruña los casos activos siguen por encima de los cuatro millares pese a bajar a 4.146, 259 menos que ayer, tras reportar 76 PCR positivas, 58 menos; la de Vigo se sitúa en 2.140 casos activos, 206 menos, tras dar cuenta de 86 PCR positivas, 27 más; y la de Santiago, 1.812 casos activos, 145 menos, tras 39 PCR positivas, tres menos.

El área de Pontevedra reduce a 1.787 los casos activos (-135) tras 48 PCR positivas (-6); la de Ourense a 1.312 casos activos (-123) tras 34 PCR positivas (-2); la de Lugo a 1.236 casos activos (-146) tras 49 PCR positivas (-19); y la de Ferrol a 1.312 casos activos (-88) tras 55 PCR positivas (+15).

En los centros sociosanitarios, los usuarios contagiados han bajado de los dos centenares -son 193- y los trabajadores infectados siete menos, hasta los 91.

El 27 de enero, con cifras inéditas, 21.293 casos activos en el recuento de la víspera por los 5.777 con los que la comunidad despidió 2020 o los 10.276 del 6 de noviembre pasado, prácticamente la mitad, fue la jornada de la entrada en vigor del riesgo extremo decretado por la Xunta para los 313 ayuntamientos, al completo.

El endurecimiento supuso cierre total de la hostelería (salvo recogida y entrega a domicilio), prohibición de reuniones de no convivientes, y restricción de la movilidad al municipio de residencia salvo por motivos justificados; véase, laborales (pese a que se ha pedido teletrabajo en lo posible), educativos o aquellos de índole sanitaria.

Pero también clausura los fines de semana de las grandes superficies comerciales, comercio no esencial únicamente hasta las seis de la tarde, práctica de deporte al aire libre y con mascarilla, y paro en el funcionamiento de los gimnasios, bibliotecas, museos, clubes sociales y de los centros de jubilados.

Los espectáculos culturales no pueden realizarse, tampoco es posible acceder a los estadios deportivos, y los universitarios retomaron el 8 las clases pero a distancia, la modalidad en la que continuarán hasta nuevo aviso.

El toque de queda es a las diez. Y todo ello para reducir la interacción social.

El pasado miércoles, el jefe del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo, se comprometió en la sesión de control del pleno del Parlamento a que la desescalada sería “medida, gradual y proporcional” en función de la situación epidemiológica y con el objetivo de “no dar pasos en falso”.

Su conselleiro de Sanidad, Julio García Comesaña, en otra comparecencia el mismo día, aconsejó cautela por ahora al hablar de suavizar, pues si bien la tendencia es descendente, todavía tenía la catalogación de “insuficiente”.

Sea como fuere, es el tema que está sobre la mesa.