Esta circunstancia está provocando que en el seno del AMPA del CEIP Guadaluz se plantee ya la posibilidad de convocar acciones de protesta contra la Consejería de Educación.
La asociación de padres remitió escritos a la delegación provincial el 26 de octubre de 2009 y el 25 de enero de 2010. En ambas misivas se solicitaba la dotación “urgente” de esta figura para el curso de 3 años del Segundo Ciclo de Educación Infantil, un curso que contaba con dos alumnos que requerían de atención educativa especial.
Sin embargo, los informes, observaciones y requerimientos realizados por los padres y madres de este curso no obtuvieron ningún tipo de respuesta a lo largo de todo el curso pasado.
Ahora, la situación se ha agravado aún más, ya que en base al informe emitido por la dirección del centro en el presente curso se hace constar que son hasta catorce los alumnos con Necesidades Educativas Especiales, a los que deben sumarse otros tres nuevos alumnos.
Los padres entienden que la ausencia de esta figura docente está mermando la capacidad de aprendizaje de numerosos escolares, ya que no se garantiza al cien por cien el normal desarrollo y aprendizaje de los niños ni la aplicación adecuada de su currículo educativo.
Según Ana María Galera, presidenta del AMPA del CEIP Guadaluz, la Junta se escuda en la falta de presupuesto para no atender la demanda de estos padres, una justificación que desde luego no aceptan los afectados.