Un doble objetivo con un fin común, el aumento de la población de Huelva para superar la barrera de los 150.000 habitantes. El proyecto de San Antonio Montija busca, por un lado, “responder a las necesidades que van a surgir de la revolución industrial, económica y social actualmente puesta en marcha”, y por otro captar a un perfil de población que habitualmente deja la ciudad para irse a urbanizaciones del área metropolitana, principalmente en Aljaraque.
Con ese espíritu, el nuevo equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Huelva, en apenas seis meses de trabajo, ha sacado del cajón el proyecto y llevará al pleno del próximo lunes la aprobación definitiva del Plan Parcial. El siguiente paso sería la tramitación de los proyectos de reparcelación y urbanización, una vez conformada la Junta de Compensación.
De todo ello ha dado cuenta este martes en rueda de prensa el primer teniente de alcalde de Urbanismo y Medio Ambiente, Felipe Arias, que ha desgranado las principales cifras de un proyecto que supone el desarrollo de casi 280 hectáreas, delimitadas por la H-30, H-31 y carretera A-5000 (Huelva-San Juan del Puerto).
Así, Arias ha destacado que “hemos desbloqueado un proyecto paralizado durante los últimos ocho años, en el que hemos trabajado desde que llegamos al Ayuntamiento, porque supone el crecimiento natural de Huelva, con 280 hectáreas disponibles para dar respuesta a las necesidades residenciales que va tener Huelva en las próximas décadas con el aumento previsto de población, además de nuevas dotaciones y servicios y las conexiones que los onubenses llevan reivindicando históricamente, como los accesos directos al Infanta Elena o la descongestión de la carretera de San Juan”.
Y es que uno de los pilares del proyecto es la mejora de las infraestructuras de conexión, pues el nuevo Plan Parcial incluye la creación de nuevos accesos al sector desde la H-31 en ambas direcciones (una de ellas desde la propia A-49 en sentido Huelva), así como el desdoble del paso subterráneo desde Holea. Además, desde la A-5000, que será objeto de desdoble, se formalizará una importante rotonda para el acceso al hospital Infanta Elena y el área dotacional de Diputación, incorporando una variante a esta carretera autonómica para segregar el área industrial del área residencial y dotacional del sector.
Pero sin duda, el gran atractivo del Plan Parcial está en la oferta de vivienda. En total, están planificadas 3.699 viviendas, de las que 688 serán unifamiliares en ciudad jardín, mientras que de las más de 3.000 previstas en bloques plurifamiliares, el 30% (un millar) están reservadas para viviendas de protección pública.
La ordenación que se debatirá en el próximo pleno incluye también una importante área de parcelas dotacionales, reservando una gran zona de equipamiento sin uso especificado, de más de 660.000 m2, entre la variante de la A-5000, que “podrá albergar dotaciones a nivel de ciudad que requieran una importante superficie de suelo”. Aunque Arias no ha querido ahondar en este aspecto, pues afirma que está aún todo por definir, sí ha adelantado que la idea es que sea una dotación que suponga un auténtico reclamo para la ciudad, que “genere valor y competitividad”.
