El jugador de tenis de mesa onubense Álvaro Robles ha hecho un balance positivo de su paso por los Juegos Olímpicos, si bien ha destacado que ahora está "totalmente vacío y también un poco triste" porque siempre trabaja para luchar por lo máximo, pero ha asegurado a sus seguidores que en París ha dado su "alma y lo mejor que tenía hasta ahora”.

Robles ha conseguido un diploma olímpico junto a María-Xiao en el dobles mixto, modalidad en la que la pareja española llegó a los cuartos de final y en la que cayó frente a las representantes de Hong Kong. En el cuadro individual alcanzó la segunda ronda y perdió ante el potente jugador brasileño Hugo Calderano.

“Ahora mismo estoy totalmente vacío y también un poco triste porque trabajamos duro para conseguir los mejores resultados”, declaró este miércoles en sus redes sociales el deportista de Huelva, de 33 años.

Álvaro Robles reconoció que “no sabría cómo describir" lo que ha "vivido estos días en París”, pues se ha “emocionado cada vez que entraba y salía de jugar gracias al mejor ambiente y público" que ha sentido en su "vida".

"La energía de mi familia, mi equipo, los miembros de la delegación española y un pabellón entero gritando 'España' ha sido lo más bonito que he experimentado en toda mi carrera", resaltó el onubense.

“Gracias de corazón por cada mensaje y por darle sentido a todo el trabajo que vengo haciendo para haber llegado hasta aquí”, afirmó el número 1 del ránking español, que anunció que, a partir de ahora, seguirá "trabajando duro" por sus "sueños y ojalá" por poder "haceros disfrutar a todos con el tenis de mesa".