Contribuir desde la Diputación de Cádiz a una gestión eficiente del agua es una de las prioridades de la actual corporación provincial con su presidenta, Almudena Martínez del Junco, a la cabeza.
Si bien no es competencia directa de la Diputación, la actual sequía y las grandes necesidades en materia hídrica que tiene la provincia hacen que la presidenta esté comprometa en este sentido para responder a la misión de asistir a los municipios más pequeños y a las zonas rurales.
Martínez del Junco considera que “la sequía no es solo un reto provincial, es un reto global que nos atañe a todos porque la falta de agua repercute en todos nosotros directa e indirectamente. Nuestro bienestar, la economía, el campo, nuestra alimentación, todo depende del agua y no podemos mirar para otra parte cuando nos jugamos tanto”.
Para ello es importante la cogobernanza entre administraciones públicas y la cooperación institucional. En este caso, con la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural.
De hecho, estos días está empezando a dar sus frutos el protocolo de colaboración firmado hace poco con la Junta de Andalucía para dar respuestas a la escasez de agua con la ejecución de proyectos en núcleos de población que tenían pendientes obras de mejora o de ampliación de sus infraestructuras hidráulicas o que bien necesitan una depuradora de agua.
Estas obras son vitales para proteger el medio ambiente y para ahorrar agua al posibilitar su reutilización, para baldeo de calles, por ejemplo, una vez depuradas.
El protocolo firmado con la Junta de Andalucía, con una duración de ocho años, sienta las bases para la mejora o para la construcción, financiación y puesta en marcha de depuradoras en 18 núcleos pequeños de población, de 5.000 habitantes el más grande y 33 habitantes el más pequeño, de los términos municipales de Algeciras, Jerez, Tarifa y Paterna. La Diputación se encarga de la redacción de los proyectos y la Junta de Andalucía de la ejecución de las obras.
Estos núcleos son Atlanterra, Bolonia, Tarifa, Tahivilla, Paterna, El Pelayo, El Mojo, Cañada del León, Rajamancera, Baldío Gallardo, Las Pachecas-Los Repostaderos, La Inmaculada, Las Tablas, El Polila, Añina, Pozo Romano, Mesas de Santa Rosa y Chaparrito.
Los frutos de este acuerdo se empiezan a ver. El pasado lunes, 16 de septiembre, la Diputación ha anunciado la licitación por valor de 237.000 euros de la redacción del proyecto para construir el nuevo emisario submarino de la EDAR de Atlanterra.
Esta una de las líneas de trabajo que está llevando a cabo la Diputación en materia de agua. La otra línea de trabajo consiste en ayudar municipios pequeños a mejorar sus redes de abastecimiento para reducir pérdidas en las mismas y así ahorrar agua. Como muestra de este compromiso, en el pleno de la Diputación celebrado el pasado miércoles 18 de septiembre, el equipo de gobierno llevó la aprobación de una importante partida de 343.000 euros para la Mancomunidad de Municipios de la Sierra de Cádiz para la mejora en las redes de abastecimiento de agua en las localidades con menos de 20.000 habitantes a través de la empresa pública Aguas Sierra de Cádiz. El mal estado de la red causa perjuicios tanto a los vecinos que sufren sus consecuencias como al medio ambiente debido a las continuas pérdidas de agua provocadas por el mal estado de la red de abastecimiento.
Con respecto al almacenamiento de agua, desde la Diputación se ha pedido al Gobierno central que ejecute la presa de Gibralmedina, cuya redacción del proyecto corresponde a la Junta de Andalucía. Se trata de una infraestructura hidráulica fundamental para el Campo de Gibraltar que está previsto que se construya en uno de los afluentes del río Guadiaro en Jimena, cerca de San Pablo de Buceite y servirá para abastecer a la población de toda la zona.