El tiempo en: Huelva
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Huelva

La acusación particular pide 150 años de cárcel por el atropello mortal de Gibraleón

La pena por asesinato solicitada es de 25 años; la de las tentativas por asesinato; 15 años cada una de las ocho cometidas; y 5 años por conducción temeraria

Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • Velas en recuerdo a la víctima del atropello de Gibraleón. -

La acusación particular en el atropello mortal de octubre de 2022 en Gibraleón ha solicitado 150 años de cárcel para el autor material de los hechos al que responsabiliza de un delito de asesinato, ocho delitos de tentativa de asesinato y uno de conducción temeraria.

Según ha explicado en un comunicado, el letrado de la acusación José Luis Orta, la pena por asesinato solicitada es de 25 años, la de las tentativas por asesinato, ascienden a 15 años cada una de las ocho cometidas y la de conducción temeraria 5 años, una petición que "apoya la Fiscalía".

Ha precisado que la defensa reconoce la autoría de los hechos pero argumenta que su representado es inimputable y por tanto debe ser absuelto de los cargos que se le imputan, solicitando medidas de internamiento psiquiátrico.

En el escrito de acusación, Orta precisa que los hechos por los que se acusa a esta persona sucedieron sobre las 14.20 horas del 9 de octubre de 2022 en Gibraleón.

En ese momento, el acusado conducían vehículo de su propiedad, y decidió, "voluntaria y plenamente consciente de actos, situarse a la altura del bar El Apoderado y colocar el vehículo en una posición certera para atropellar y matar al mayor número de personas posibles".

Previamente al atropello se le escuchó gritar, según los testigos, "a esa mesa hay que atropellarla", "os voy a llevar por delante" u "os tengo que matar a todos", dando a entender que "lo que pretendía era que se supiera claramente cuáles eran sus intenciones y frente a quiénes iba a actuar de forma deliberada y concreta".

Considera la defensa que entre el medio elegido para matar, un vehículo a gran velocidad, y la sorpresa de los hechos, "la capacidad de respuesta fue limitada" por aquellos elegidos por el acusado.

Sufrieron el primer embiste una mesa donde estaban tres personas, una de las cuales presenta a día de hoy las secuelas más ostensibles, y en la segunda mesa alcanzada había otras cuatro personas, resultando una de ellas muerta por el impacto.

Posteriormente al atropello mortal, el acusado siguió su marcha "buscando hacer más daño voluntariamente" y se dirigió a otro bar donde dirigió su vehículo a otra mesa y tras embestirla con el coche el acusado gritó "ya no vais a hablar más de mi". "ahora os vais a reír con razón". huyendo a continuación y siendo detenido posteriormente.

Indica la acusación que "existía un vínculo de enemistad manifiesta entre el acusado y una de las personas atropelladas por una ruptura de pareja, así como otra enemistad entre el acusado y el padre de esta que acabó con otro atropello intencionado con el vehículo por parte del acusado".

El acusado, según informe forense exhaustivo, fue diagnosticado de trastorno antisocial y se llegó a la conclusión de que tenía sus facultades plenas y conscientes sobre el daño que había realizado, que "no es un enfermo mental sino más bien una persona normal a efectos de imputación delictiva, con trastorno antisocial de desprecio a las normas y a las personas que le rodean".

Tras finalizar la instrucción del procedimiento después de más de 2 años, ahora pasarán los autos a la Audiencia Provincial de Huelva que conformará el tribunal del jurado y pondrá fecha de juicio

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN