“No estamos dispuestos a consentir que nos pongan semejante bomba de relojería a 500 metros de las viviendas”. Quien habla es Ángel Colete, vecino de Valdelamusa y miembro de la directiva de Valdelamusa Viva, asociación que convocó este martes una manifestación a las puertas de la Diputación Provincial de Huelva.

El motivo, la nueva balsa de residuos mineros que Matsa proyecta en la zona, que ya cuenta incluso con la Autorización Ambiental Unificada (AAU) por parte de la Junta de Andalucía.

Junto con la manifestación, los vecinos de la zona, organizados en esta nueva asociación, han presentado 5.000 firmas en la institución provincial y después han hecho lo propio en la Delegación del Gobierno de la Junta en Huelva.

El objetivo es lograr sentarse con las administraciones y que los “escuchen”, algo que aún no han conseguido hacer con la empresa minera.

No es la primera acción reivindicativa que hacen, y tampoco será la última, porque como ha dejado bien claro Colete: “No estamos dispuestos a consentir, vamos a pelear y a luchar por todos y todas, para que respeten el bienestar, la salud de los vecinos y el medio ambiente”.

Conscientes de que son como “David pelando contra Goliat”, están dispuestos a llegar donde haga falta: “Es un despropósito lo que quieren hacer, y si las medidas legales se agotan, evidentemente llegarán medidas más drásticas con todas sus consecuencias”.

Sobre el proyecto en cuestión, ha indicado que la construcción de esta balsa de residuos tóxicos y peligros de ‘Categoría A’ según la normativa europea, ocupará 130 hectáreas en las cercanías de Valdelamusa, y para ello se cortarán 36.000 pinos.

La clave, insisten, es el “perjuicio” que esta instalación causará en la salud de los vecinos, así como al medio ambiente, ya que consideran que la misma “no sólo contaminará el ambiente sino también los acuíferos al ubicarse encima de un pantano de rescate que suministra agua a poblaciones del entorno y que llega al río Odiel”.

La balsa se plantea íntegramente sobre una superficie de 116,6 hectáreas de naturaleza forestal arbolada, con densidad variable. También se prevé construir una serie de infraestructuras necesarias como tuberías de bombeo y línea eléctrica que afectan a los términos municipales Almonaster la Real y El Cerro de Andévalo.