Un grupo de investigadores han encontrado en los fondos del Museo de Cádiz el cuerpo de un estatua dedicada a Livia Drusila, emperatriz de Roma, cuya cabeza fue hallada hace 57 años en un yacimiento en Medina Sidonia y que está expuesta en la institución, por lo que ahora se ha podido unir toda la escultura.
Según ha explicado el director del Museo de Cádiz, Juan Alonso de la Sierra, el trabajo de los arqueólogos José Beltrán y María Luisa Loza, en colaboración con el restaurador Luis Carlos Zambrano, ha permitido ensamblar cabeza y cuerpo de una estatua que puede tener unos 2.000 años.
Fue en 1960 cuando se descubrieron en Medina Sidonia, en los restos de la antigua ciudad romana de Asido, tres cabezas de esculturas correspondientes a Livia Drusila, esposa de Nerón y Augusto y madre de Tiberio, y sus nietos Germánico y Druso Menor.
En esta misma excavación se encontraron más restos de mármol, pero en el Museo de Cádiz sólo se expusieron en la sala romana las tres cabezas, mientras que los demás hallazgos fueron almacenados en los fondos del edificio.
Beltrán y Loza, de la Universidad de Sevilla, tuvieron conocimiento hace dos años de que en las excavaciones de Medina consta la aparición de un cuerpo de estatua femenina sin cabeza, y solicitaron poder revisar esa pieza por si podía coincidir con la cabeza expuesta.
El Museo de Cádiz accedió a esta petición, la pieza fue sacada del almacén, donde había permanecido en la oscuridad casi sesenta años, y los expertos descubrieron que, por las dimensiones y el material empleado, la cabeza y el cuerpo podían corresponder a una misma estatua de Livia.
"Ha sido un trabajo muy laborioso y minucioso. que ha permitido comprobar nuestra hipótesis", ha explicado José Beltrán.
"Ha habido que limpiar la pieza, estudiar cómo la poníamos de pie, y finalmente encajar la cabeza", ha relatado el restaurador Luis Carlos Zambrano, quien confiesa haber vivido con "gran emoción" el momento en el que ambas piezas quedaron ensambladas.
El descubrimiento arqueológico facilitará a los investigadores poder datar la estatua en su momento exacto, aclarar la procedencia del mármol empleado, equiparar esta figura a la de otras representaciones de Livia en el mundo, y, sobre todo, profundizar en el estudio del uso de los colores en este tipo de esculturas.
El cuerpo de Livia conserva colores azules de la representación de la túnica, y algunos ribetes dorados.
"Descubrir esta policromía es algo poco frecuente", destaca el director del Museo, Juan Alonso de la Sierra.
La estatua está siendo analizada por técnicos del Instituto Andaluz de Patrimonio para realizar una representación en tres dimensiones.
La pieza, ya unida, se puede contemplar en la sala romana del Museo de Cádiz.