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El Recre hace lo mejor y lo peor

Se marcha al descanso 0-2, iguala en dos minutos y remonta y luego vuelve a encajar gol a falta de dos minutos para el final

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Jugadores del Recreativo celebrando uno de los tres goles conseguidos.

Decepción en las filas recreativistas tras encajar un gol.

Chuli anotando el tercer gol del Decano.

Alberto Quiles fue el mejor del partido.

El Recreativo de Huelva demostró una vez más esta temporada la tremenda irregularidad en su juego, siendo capaz de lo mejor y de lo peor durante un mismo partido y así es imposible que pueda estar entre los mejores y por favor que cuanto antes gane varios partidos para no ser de los peores del grupo. En un encuentro al que se le puede sacar poca explicación por parte de ambos entrenadores, el Decano regaló hasta tres goles a balón parado, dos de ellos antes de la primera media hora de juego, para luego ser capaz de igualar el partido en dos minutos tras la reanudación, hacer el fútbol de la Copa del Rey, pudiendo marcar varios goles, ser capaz de remontar 0-2 en contra y luego volver a encajar otro tanto a balón parado cuando faltaban dos minutos para el final. Y todo eso en 90 minutos, un auténtico Doctor Jekyll y Mister Hyde digno de estudio.

Alberto Monteagudo, que fue pitado al inicio del partido, introdujo hasta cuatro cambios en su once inicial, uno obligado por sanción, el de Morcillo por Borja García en defensa y otros tres por decisión técnica; Alberto Martín por Gerard Vergé, Chuli por Alberto Quiles y Carlos Martínez por Irizo en ataque.

El primer cuarto de hora fue insulso y sin una ocasión ni para uno ni para otro bando pero el partido se abría en el minuto 18 a balón parado, cuando en un balón dividido, Morcillo iba a un cruce y quedaba renqueante y justo en el córner, Rafa Mella, al que marcaba Morcillo, remataba a placer de cabeza y ponía por delante al cuadro extremeño. Además, peor no se le podía poner las cosas cuando en el 26 en otro saque de esquina, otra vez fallo de marcaje, remate al palo de Poley y Rafa Mella en el rechace, enviaba de nuevo el balón al fondo de las mallas.

0-2 antes de llegarse a la media hora de juego para un Recre de nuevo a la deriva y perdiendo con un nuevo rival de la zona de descenso. El público se enfadaba y con razón con un equipo apático en defensa y sin ideas en ataque, que aunque le ponía ganas, está demostrando que están todos los que componen este plantel muy por debajo de lo esperado al inicio de la competición. Con ventaja emeritense y una gran pitada para el banquillo y el palco se llegaba al descanso con un Recre con mucho por mejorar y tremendamente irregular.

 

Reacción

Monteagudo se la jugaba con un doble cambio y sacaba a José Carlos y Alberto Quiles por Kike Rivero y Carlos Martínez y mejor no le pudieron salir las variaciones, ya que en dos minutos era capaz de empatar el encuentro, en el 46, un centro de Nano, lo tocaba Chuli y en el segundo palo Quiles marcaba su primer gol, para nada más sacar de centro, corte de nuevo del Recre, nuevo centro de Nano y Quiles de cabeza empataba e igualaba el partido.

El Mérida volvía a tener dos claras ocasiones de gol, primero en un disparo de Chirri Monje, al que Nauzet le hacía una gran parada y en el saque de esquina posterior, Emilio Cubo remataba de cabeza al palo. El encuentro se abría y podía ganar cualquiera.El Recre volvía a ser el de toda la temporada, capaz de lo mejor y de lo peor y tras una primera parte horrible, era capaz de remontar el encuentro cuando en el 70, control y pase de José Carlos para Cera, pase interior para Chuli, que sorteaba a Javi Sánchez y marcaba a puerta vacía para dedicarle el gol a Iván González.

El tercero del Recre provocaba un cabreo monumental en el técnico emeritense, Diego Merino, que hacía un triple cambio y daba entrada a Jardel, Gaspar y Santi Villa por Salvi, Arturo Segado y Poley, mientras que Alberto Monteagudo le daba los primeros minutos a Cristian Martínez, que sustituía a Chuli.Y cuando el partido ya moría, el Recre volvía a encajar un nuevo gol, cuando en el 88 en una nueva falta lateral, balón mal rechazado y Jardel marcaba de disparo cruzado. Una vez más, ver para creer.

 

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