El nuevo escenario que supone el reto planteado por el cambio climático, la escasez y sobreexplotación de recursos y la contaminación y la extinción de ecosistemas, obliga a nuestra sociedad y a su economía a tender hacia una senda más sostenible. La Agenda 2030 con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) o el Pacto Verde de la UE, son ejemplos de la necesidad imperiosa de transformarnos en una sociedad más equitativa y próspera, con una economía sostenible y respetuosa con los recursos y con el medioambiente. La Caja Rural de Jaén es una entidad financiera que ha sido y es un ejemplo de gobernanza, de solidez y de calidad. Su compromiso con la sociedad y con el territorio donde está presenta, se ve refrendado en méritos como el de hacer a Jaén, una de las pocas provincias de España donde no existe exclusión financiera (según “Informe sobre la inclusión financiera en España” 2022 del IVIE), con una apuesta firme por estar presente en prácticamente todos los municipios de la provincia.
“En este tiempo de cambio, el sistema financiero representa un papel clave en la transformación hacia una economía más ecológica y sostenible. Y, para ello, debemos reorientar nuestro esfuerzo para financiar inversiones que favorezcan un crecimiento igualmente sostenible e inclusivo; gestionando los riesgos financieros que se derivan del cambio climático, del agotamiento de los recursos, de la degradación del medio ambiente y de los problemas sociales; y, a su vez, debemos fomentar que esto se haga con total transparencia y con la mirada puesta en el largo plazo”, explica el director General de la entidad, Enrique Acisclo.
Añade: “Somos conscientes que, la Caja Rural de Jaén, es una referencia en la provincia y queremos seguir siéndolo, apostando por una transformación que propicie que nuestra organización siga siendo este referente. Para ello, asumimos nuestra responsabilidad en apoyo a la descarbonización de la economía mediante la adaptación y alineamiento de nuestros productos de financiación y de ahorro con los objetivos climáticos. Además de incorporar los factores ambientales, sociales y de gobernanza (ASG) en el análisis de riesgos y decisiones de inversión.”
La Caja Rural de Jaén, en su plan estratégico 2023-2025 asume una serie de retos en materia de sostenibilidad. Como entidad, confirma su compromiso para alcanzar emisiones cero en el año 2030, para lo que pretende Impulsar un proyecto de absorción de CO2 en la provincia, que permita a la entidad compensar sus emisiones de carbono, pero que también suponga un impacto beneficioso desde el punto de vista medioambiental al propiciar la reforestación de un área deprimida. “Nos gustaría que este proyecto sea una referencia a la que se puedan sumar otras empresas para mitigar su huella de carbono”, nos matizan desde la entidad. Pero, además, dentro de este compromiso con la descarbonización, la entidad va a impulsar y dar soporte alas comunidades energéticas locales, y apoyará a clientes y proveedores para que reduzcan sus emisionesque les permita adaptarse al cambio climático.
“Estamos transformando la entidad para que sea capaz de asumir los desafíos que supone este nuevo escenario. Hemos creado un área específica de sostenibilidad y vamos a promover e impulsar productos de impacto que incluyan la financiación verde y también financiación social. Y,todo esto, lo queremos hacer trabajando desde la honestidad, el compromiso y la cercanía, con el objetivo de contribuir a un futuro sostenible para personas, empresas, sociedad y territorio y de seguir siendouna entidad financiera de referencia donde estemospresentes.”, concluye Acisclo.