La psicóloga de la Asociación en Defensa a la atención a la Anorexia y la Bulimia, Adaner-Jaén, Mª Isabel Gómez, asegura que el trabajo de control de las familias está propiciando que los casos entre adolescentes no lleguen en un estado “grave” que requiera una intervención urgente por el alto nivel de desnutrición de la persona.
“Cada vez se conoce más ambas enfermedades y las familias las detectan con más tiempo de antelación para un tratamiento menos severo”, ha valorado a VIVA JAÉN, Mª Isabel Gómez.
En torno al 2% de la población jienense sufre trastornos alimenticios, siendo la bulimia la enfermedad predominante entre los más jóvenes, triplicando en número de casos a la anorexia.
Sin embargo, su detección es más complicada, frente a los símbolos evidentes de las personas que sufren anorexia. Éstas últimas son niñas de entre 9 y 15 años y personas adultas.
“Este año hemos detectado un aumento de los casos entre los hombres, pasando de uno el año pasado a trabajar con cuatro chicos este año”, recuerda la psicóloga.
Desde Adaner aseguran que la época estival es un período de tiempo “peligroso y complicado”, pues es cuando comienza a gestarse los hábitos del trastorno alimenticio. Tras el verano, los casos que requieren un tratamiento aumentan en la Asociación. De ahí que el mensaje que lanzan es que las familias vigilen los hábitos alimenticios de los más jóvenes.