Desirée Vicente está pendiente de que la Policía se lleve a su hija de 5 años de su casa de Linares (Jaén) a un centro de menores después de que la Audiencia de Madrid haya resuelto que sea devuelta a Suiza con su padre biológico, un abogado al que no ve desde hace dos años y que está imputado por maltrato.
La madre tiene la custodia provisional de la niña desde hace un año, otorgada por un juzgado de violencia sobre la mujer que además fijó las visitas para el padre en un punto establecido y vigilado, entre Linares y Neuchâtel (Suiza), algo que él no ha cumplido, ni se ha preocupado de su manutención, según ha explicado a Efe Desirée.
Ahora, la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid acuerda la restitución de la menor a Suiza ante una petición de ese país de que regrese con el padre, que tiene la nacionalidad sueca y griega.
La Audiencia de Madrid estima el recurso de apelación presentado por el padre y revoca el auto de 14 de abril de 2014 de un juzgado de instrucción madrileño, por lo que ordena la restitución de la menor a Suiza.
También deja sin efecto la prohibición de salida del territorio español de la menor acordada el 15 de abril de 2014 por un Juzgado de Violencia sobre la Mujer.
La niña, O.K.V., que tiene una gran dependencia de la madre y que se encuentra integrada en el colegio y en su núcleo familiar en Linares, ha tenido que ser llevada en dos ocasiones al hospital, desde que ayer por la tarde le comunicaran la noticia, a causa de la ansiedad y el asma.
Ayer, la Policía se personó en el domicilio para llevar a la niña a un centro de menores, cumpliendo la orden judicial, pero ante la oposición de la madre y el estado de la niña, que fue justificado con un informe de urgencias, lo pospusieron.
La actual pareja de la madre ha asegurado a Efe que los abogados han pedido medidas cautelares y que van a pedir un recurso de amparo al Tribunal Constitucional por indefensión, ya que hay sentencias contradictorias, pero mientras se resuelven los trámites, la niña tendría que permanecer en un centro de menores o con su padre si éste viniera a recogerla.
Desirée Vicente, que estudió en la Universidad de Neuchâtel, regresó a España en 2013 después de haber sido agredida en plena calle en Grecia, donde pasaba las vacaciones con la familia de su exmarido, y de donde salió "con lo puesto" escoltada hasta el aeropuerto por la policía griega y con ayuda de la embajada.
