Las lluvias que se han registrado a lo largo de esta última semana en Jerez y su entorno alivian la sequía que se viene produciendo, si bien no permiten revertir todavía la situación.
Según José Luis Ibáñez, de COAG, las precipitaciones permiten que cultivos de secano como el trigo se garanticen la nascencia y que el girasol “se pueda hasta salvar”.
La situación del trigo “es distinta” porque el cultivo “lleva retraso” y ya no es posible que se alcancen los niveles de producción de un ejercicio “normal”.
Para los cultivos de regadío “toda la lluvia que caiga es buena porque suma”, pero por ahora la incidencia en los pantanos de estas precipitaciones “es baja”.
“Tendrían que acumularse más lluvias para que la tierra se saturase y el agua llegara a los pantanos”, explicó Ibáñez.
La lluvia ha sido especialmente bien recibida por los ganaderos, ya que va a permitir que se regeneren los pastos. En cualquier caso, a este colectivo le preocupan además otros problemas, como los derivados del incremento del precio de los piensos.
“Estas lluvias alivian un poco la situación, pero tiene que seguir lloviendo muchísimo más. Tendrá que estar lloviendo de esta manera durante un mes. Entonces sí que cambiaría la cosa”, subrayaron desde la organización agraria COAG. Hay relativo optimismo con las previsiones para la próxima semana, que hablan de la llegada de nuevas lluvias.
“Parece que el anticiclón se ha desplazado y eso permite la entrada de bajas presiones. Si esto continúa así las precipitaciones podrían ser más constantes”.
Las previsiones de la Aemet hablan de una pequeña tregua durante estos días, confiándose en la llegada de nuevas lluvias para la tarde del domingo que seguirían al menos hasta el miércoles.