Escarcena, quien desconocía la no existencia de partida alguna para toros esta temporada, aclaró, no obstante, que está al tanto de las gestiones realizadas por los responsables de festejos del municipio “para ver si alguna empresa” salva los festejos, como ocurrió con Los Barrios, donde recordó que una firma privada se comprometió a subvencionar, con 50.000 euros, los festejos en La Villa. En San Roque no habrá tanta suerte, según el pronóstico de Escarcena.
El propio empresario reconocía la falta de rentabilidad que esta feria ha arrastrado en los últimos años, aunque se lamentó de la tendencia, esto ya a nivel andaluz, de las administraciones, a disminuir sus apoyos a la fiesta taurina de un tiempo a esta parte. “Ha costado trabajo defender esta feria, que se celebra en una plaza con poco aforo, y en un mes de agosto en el que ya han pasado todas las ferias del Campo de Gibraltar”.
El empresario ya había adelantado meses atrás a este diario las dificultades por las que pasan los festejos en las plazas menores, hasta el punto que de los 18 festejos que se realizaban tradicionalmente en la comarca, el pasado año sólo fueron ocho.
Escarcena dejó constancia ayer de que otro festejo del término municipal sanroqueño que ha pasado por dificultades en los últimos años, el de la barriada de San Enrique, ha sido posible sólo “gracias al esfuerzo de una peña taurina que ha aportado el dinero para hacerlo posible”, recordó, “pero ahora ya no sé si estarán dispuestos a continuar con este sustento”, apuntilló.
En cuanto a las posibilidades de que lo ocurrido en San Roque se reproduzca en otros municipios campogibraltareños, Escarcena se mostró en condiciones de afirmar que, “por el momento”, las ferias taurinas de Facinas y La Línea, que correrán con su organización, al igual que el pasado año, “van a celebrarse. Se darán las condiciones y estamos ahora en el tema de las negociaciones”.
Asimismo, Escarcena se lamentó de que la cancelación de la feria taurina de San Roque costará unos 30 puestos de trabajo en contrataciones eventuales, incluyendo “transportistas, banderilleros, acumuladores e incluso veterinarios”.
Escarcena se lamentó, como aficionado a los toros, de la falta de apoyo municipal en San Roque a los festejos taurinos, aunque matizó sus argumentos con que conoce la situación económica de la ciudad. No obstante, como empresario declaró que para él no poder organizar estos festejos no supone una pérdida de dinero, ya que “en los tiempos que corren, “los empresarios que menos festejos organizan son, precisamente, los que menos pierden”, ironizó.
