Este año serán 120 las personas que se sumen a la iniciativa
La Fundación Migres presentó ayer el programa de Voluntariado Ambiental, cuya primera fase, que comenzó esta semana, finalizará en octubre. La directora general de Participación Ciudadana de la Consejería de Medio Ambiente, Rocío Espinosa, recordó que el programa de avistamiento de aves comenzó en 1997 con el objetivo de realizar un “seguimiento científico a largo plazo de los patrones migratorios”.
Espinosa señaló que el seguimiento de aves planeadoras, marinas y paseriformes ha recibido un total de 420 solicitudes este año, de las que se han seleccionado 120 de 12 países, lo que “ratifica la dimensión y el interés internacional” por esta propuesta. Durante 2009, los voluntarios de Migres realizaron 79 jornadas de trabajo contándose más de 560.00 aves. Desde el comienzo, un total de 2.000 voluntarios han participado en esta experiencia con un índice de repetición de dos años.
Mientras, la directora de la Fundación Migres, Eva Casado, resaltó que el programa con voluntarios es “fundamental y muy interesante a nivel estratégico”.
Así, mediante la evolución y la observación de los cambios en el modelo migratorio, a través del seguimiento y la obtención de índices de abundancia de las especies que atraviesan el Estrecho, “se pueden detectar posibles problemas futuros”. Este año se ha incorporado un nuevo observatorio, en terrenos cedidos por el Ministerio de Defensa en la batería de Puntacamorro, dentro del Parque Natural del Estrecho”.
Finalmente, el coordinador del programa, Gonzalo Muñoz, valoró la “dura labor” de los voluntarios con el método de conteo “artesanal” mediante prismáticos y telescopios, a quienes “atrae el fenómeno migratorio en el Campo de Gibraltar”, atractivo para “ornitólogos de todo el mundo”.