La azucarera de El Portal -la única que funciona ya en Andalucía- iniciará este próximo lunes la campaña remolachera, que se estima se prolongue por espacio de 40 días, lo que situaría su cierre en el 4 de agosto.
Las previsiones del sector no parece ser demasiado optimistas debido fundamentalmente a la confluencia de dos factores. De un lado, el precio que la industria ofrece al agricultor sigue estando congelado, valorándose en 46 euros la tonelada incluidas todas las ayudas. Por otra parte, no conviene olvidar que la siembra otoñal debió retrasarse más como consecuencia de las fuertes lluvias que se registraron en toda la zona.
Estas dos circunstancias justifican que en toda la zona sur apenas se hayan sembrado este año 4.500 hectáreas de remolacha, frente a las 7.500 de la pasada campaña. Eso supone una merma del 40 por ciento. En la provincia de Cádiz se han sembrado 1.800 de esas hectáreas, produciéndose el resto del cultivo fundamentalmente en la provincia de Sevilla.
Todo ello va a provocar que la producción final de remolacha ronde las 300.000 toneladas, muy lejos por tanto de alcanzar las 525.000 con las que se echó el cierre a la campaña de 2012. El descenso final de la cosecha va a situarse por tanto por encima del 40 por ciento.
La singularidad que ha marcado la campaña desde el punto de vista meteorológico provoca que existan dudas sobre la calidad final de la cosecha. Desde el Grupo Remolachero de Cádiz aseguran que el fruto que se sembró a principios de octubre -antes de que llegaran las lluvias- se encuentra en bastante buen estado.
Distinto es el caso de la remolacha que se sembró en diciembre, que no ha terminado todavía de madurar. De hecho, será este fruto el que entre en la azucarera de El Portal a finales del próximo mes de julio, ya que es entonces cuando se espera que pueda alcanzar un grado de maduración óptimo.
Tal y como viene ocurriendo en estos últimos años, la azucarera de Guadalete molturará remolacha las 24 horas del día, a una media aproximada de 7.000 toneladas.