El Grupo Municipal Socialista asegura que el caos provocado en el cobro de los recibidos del agua por parte de Aqualia es consecuencia de la privatización chapucera que ha llevado a cabo el PP y la alcaldesa Pelayo, quien lejos de reconocer su responsabilidad por los perjuicios causados a los usuarios se limita a “pedir disculpas”, en vez de poner soluciones de forma urgente al desbarajuste que ha creado. Todo ello pone de manifiesto que la privatización de la gestión del agua consumada por el PP sólo responde al interés de que Aqualia obtenga beneficios, olvidando a los ciudadanos que sí están notando el cambio de la gestión y están sufriendo las consecuencias de un pésimo servicio. De hecho, la venta de Ajemsa ha supuesto el incremento del recibo, el sobrecoste del servicio de la basura y, ahora, el descontrol de los problemas generados del pago de facturas bancarias.
Según denuncian, la pésima gestión que está ofreciendo Aqualia a los usuarios es aún más grave si se tiene en cuenta que esta empresa privada se endosa más de 300.000 euros al año por parte del Ayuntamiento para gestionar la recaudación de la tasa de basura que anteriormente gestionaba Jereyssa, tal y como denunció el Grupo Municipal Socialista. Es decir, que Aqualia obtiene un beneficio extra a costa de un servicio público, incrementando sus márgenes de beneficio, a pesar de que no ha repercutido en una mejora para los usuarios, sino todo lo contrario.
El PP y la alcaldesa Pelayo se jactaron en defender la privatización del agua cuando los hechos están poniendo de manifiesto los graves perjuicios que está ocasionando, ya que no sólo Jerez ha perdido una empresa municipal que funcionaba de forma eficaz y que prestaba un buen servicio en detrimento de la calidad del mismo. La alcaldesa mintió y sigue mintiendo de forma compulsiva ante las decisiones que está tomando este gobierno de la derecha, anteponiendo los intereses de empresas privadas por encima del interés general.
Ante la "tropelía" que la señora Pelayo ha cometido con la venta del agua no valen disculpas, sino asumir su responsabilidad por haber regalado un servicio público a una empresa privada que sólo quiere hacer negocio y lograr beneficios en su cuenta de resultados, a costa de exprimir el bolsillo y la paciencia de todos los jerezanos. "Confiamos en que los ciudadanos no olviden el daño que la señora Pelayo está haciendo a Jerez, una ciudad que está ofreciendo una imagen lamentable, como la que hemos visto estos días con colas para pagar los recibos del agua, con problemas de limpieza, de alumbrado público, carestía de servicios y parálisis total en la gestión".