A partir de las 2.30 horas de la tarde de hoy comenzará una nueva sesión parlamentaria, donde está previsto presentar dos leyes, una referida a la enmienda al Acta de la Policía de 2006 y la otra al crematorio. Asimismo está previsto que se expongan seis proyectos de ley, aunque no se podrá discutir sobre ellos debido al reglamento parlamentario, en el que se especifica que deberá transcurrir un plazo de seis semanas para seguir adelante con los proyectos de ley.
El ministro principal expondrá las normativas de 2008 relacionadas con los impuestos y la compra de viviendas.
Concentración
Coincidiendo con la apertura del Parlamento, hay prevista para el medio día de hoy y hasta las 4.00 horas de la tarde, una manifestación pacífica frente a las puertas del edificio.
Los organizadores de la protesta, que son los compradores del proyecto de viviendas que se están viendo afectados por las continuas demoras en las obras, no podrán pasar a la zona de exclusión que se aplica cuando hay sesiones parlamentarias, lo que evitará que los manifestantes se agrupen a la entrada del edificio. La policía de Gibraltar ha dado algunas instrucciones a los organizadores, como no obstruir el tráfico de peatones, no gritar o utilizar megáfonos, no portar pancartas con insultos al Gobierno o al ministro principal y no abuchear a los ministros a su entrada al Parlamento. Los concentrados deberán colocarse frente al edificio, en la zona de comercios.
Por su parte la oposición socialista liberal mostraba ayer tarde su sorpresa por las condiciones impuestas por la RGP.
Señala la coalición que durante años se han celebrado numerosas manifestaciones frente al Parlamento y nunca habían escuchado restricciones como estas.
Para socialistas y liberales no es necesario recordar que siempre en este tipo de actos se debería actuar dentro de la legalidad, aunque matizan que la ley sólo ha sido interpretada de esta manera tan restrictiva desde que Peter Caruana llegó al poder, habiendo influenciado también el comportamiento de la policía.
“Ser abucheado en política es algo a lo que uno se arriesga cuando se presenta a unas elecciones. Es increíble que los ciudadanos sean libres para abuchear a Gordon Brown o a George Bush, pero no puedan ahora hacerlo con Peter Caruana”, concluye la oposición.