Dejan claro que se encuentran "en plena disposición a negociar" pero "no están dispuestos a hacerle el juego al equipo de Gobierno",
CGT, SIP y CSIF han pedido a la alcaldesa Mamen Sánchez que "deje
de manipular la información y de faltar a la verdad". Las secciones sindicales han insistido en un comunicado en que se encuentran "en plena disposición a negociar", pero no están dispuestos a hacerle el juego al equipo de gobierno y a los técnicos que controlan el Ayuntamiento, en su mayor parte del sindicato ATMJ.
En este sentido, apuntan a que para modificar el convenio hay un trámite establecido porley que la Alcaldesa y la delegada de Recursos Humanos, pretendensaltarse a la torera , incidiendo así en una clara, evidente y arbitraria ilegalidad."La alcaldesa no puede asistir a una Mesa General de Negociaciónconforme al Reglamento, su presencia en la última Mesa, aseguranque “forma parte del circo que tienen montado”.
CGT, SIP y CSIF, aseguran que en sus últimas declaraciones respecto a su falta
de asistencia a las Mesas Generales de Negociación convocadas, la alcaldesa manipula
la información y miente, puesto que contar solo una parte de la verdad es mentir.
Afirman que “es cierto que no hemos asistido a la Mesa de Negociación, pero
no hemos asistido porque hay razones muy poderosas para no hacerle el juego al
equipo de gobierno y a los técnicos que controlan el Ayuntamiento, pertenecientes en
su mayor parte al sindicato ATMJ, como es el caso de la Directora de Alcaldía –
Presidencia “si no eres de la ATMJ, olvídate de jefaturas y direcciones” afirman.
El Acuerdo-Convenio es la manifestación de la voluntad del colectivo detrabajadores y de la Corporación para la ordenación de las relaciones entre ambas partes, y es expresión de los derechos adquiridos por los empleados municipales a lo largo de los años, como se ha comunicado por escrito a cada convocatoria de la Mesa General de Negociación “para modificar el Acuerdo–Convenio hay un trámite establecido por ley que la Alcaldesa y la Delegada de Recursos Humanos, con el asesoramiento e impulso de los técnicos que controlan de facto el Ayuntamiento,pretenden saltarse a la torera , incidiendo así en una clara, evidente y arbitraria ilegalidad”.
CGT, SIP y CSIF, insisten en que no están dispuestos a hacerle el juego a
estos modos de actuar autoritarios, despóticos y abusivos. Y ello lo hacemos,
sencillamente, en defensa de los trabajadores municipales, a diferencia de otros.
Vuelven a recordar, que el gobierno municipal ha aprobado de forma unilateral
la modificación de la RPT, con la que han creado nuevos puestos de jefatura y
dirección que cuestan más de 400.000 € y con la suspensión del Art. 27.1 pagan horas
extras a jefes y directores, a pesar de que esos puestos suponen total disponibilidad
horaria, y que la Alcaldesa manifestó, descaradamente hace unos días, que las
medidas se iban a tomar “si o si”, por lo que se preguntan “¿por qué no aprueban ya el
resto de medidas? ¿es por qué son conscientes de que si lo hacen no tendrán el 70 %
de la plantilla en contra, sino el 100 %?”.
CGT, SIP y CSIF, aseguran que las mentiras son muchas por parte de la
Alcaldesa y de la Delegada de Recursos Humanos, “miente con falsas promesas de
estabilidad a los laborales, ofreciendo subidas de sueldo subiendo la valoración de
determinados puestos de la RPT legalmente irrealizables e incompatibles con el
famoso Plan de Ajuste, acaso ¿nos pretende engañar igual que hace con los afectados
por el ERE?”.
Por último, los tres sindicatos coinciden en que “no podemos entender que la
alcaldesa, asesorada por los técnicos que la rodean y que no parece que la respeten
mucho, se preste al paripé de asistir a una Mesa General de Negociación Conjunta
cuando por Reglamento no puede hacerlo, ¿acaso pretenden que se le eche de la
Mesa como se hizo en su día con los Delegados Municipales? ¿qué falta de respeto es
esa hacia nuestros representantes políticos? ¿por qué quieren ridiculizarlos de ese
modo los técnicos de Presidencia?”
CGT, SIP y CSIF, insisten en que mientras no se cumpla la ley no se sentarán a
negociar nada porque no están dispuestos a participar en un trámite “irregular e ilegal".
