Un gibraltareño de 23 años ha sido sentenciado por el tribunal de magistrados del Peñón, a 21 días de prisión por agredir a un agente de la policía.

El caso se remonta al 22 de junio del presente año, cuando Colin Wesley Fisher, residente en el número 59/5 de la plaza John Mackintosh, fue arrestado en Casemates Square. Los agentes recibieron quejas por los problemas que el sujeto estaba causando al negarse a abandonar un local.

Se resistió agresivamente y tuvo que ser reducido por los agentes para poder ser trasladado a la central policial de New Mole House, donde mientras permanecía bajo custodia donde agredió a uno de los policías. Ha sido sentenciado esta semana a 21 días de cárcel.