Este edificio, a su entender “capaz y dispuesto para mil actividades”, permanece, según él, “prácticamente inactivo” por la “falta de ideas del gobierno de Herrera”. Mientras, “se están pagando altísimos alquileres por edificios municipales destinados a administración o docencia, cuando éste puede prestar dichos servicios , al poseer modernas instalaciones, un auditorio para 180 personas, cabinas de traducción simultánea, un centro de recepción de visitantes, aulas, salas climatizadas, camerinos, etc”, sentenció.
Salas en desuso
Ramírez denunció “el desmantelamiento sistemático” y la “sangría artística” al desaparecer “innumerables atractivos”, como “una biblioteca temática y del centro de interpretación sobre las dos orillas del Estrecho de Gibraltar, compuesto por cinco salas”, estancias que “permanecen vacías, inactivas, como almacenes”.
Ramírez reconoció, no obstante, que el edificio, sede de la Fundación Dos Orillas de la Diputación Provincial, sirve para “algunos encuentros y exposiciones”, que para él “no suponen ni un 5% del potencial de su realización”.
A todo ello, manifestó quejas por la conservación del edificio. “Los techos de los despachos del Delegado de Turismo, y otros más, amenazan con desplomarse”.