Con el inicio de 2019, año electoral, arranca oficialmente la cuenta atrás para los comicios municipales de mayo,o lo que es lo mismo, la carrera a la Alcaldía de Jerez de los partidos municipales. Este plazo es por tanto el que tiene por delante el Gobierno local socialista de Mamen Sánchez para culminar los proyectos prometidos pendientes, que no son pocos, e iniciar otra batería de actuaciones, también bastante generosa, que verán la luz la próxima legislatura.
Uno de los más inminentes será la mejora del castigado servicio de limpieza viaria, una de las prioridades del PSOE desde su llegada al Ayuntamiento, ante las reiteradas quejas ciudadanas que han ratificado incluso informes a nivel nacional. Pese a las últimas interferencias, por tener que volver a sacar a licitación la prestación del servicio, con un contrato público que destinará tres millones anuales más (una media de 23,4 millones al año), las previsiones pasan por adjudicarlo a finales de febrero para que la concesionaria pueda empezar a gestionarlo en abril, cuando vence el contrato actual. También en primavera está previsto que la flota de autobuses se refuerce vía renting con nueve autobuses a estrenar propulsados por Gas Natural Comprimido.
Va justa de tiempo, pero la alcaldesa también se ha comprometido a iniciar el proyecto de reordenación del eje histórico del Arroyo-La Asunción por un millón de euros, financiada a través de la ITI (Inversión Territorial Integrada) de la Junta de Andalucía. Se trata de un proyecto que arrastra un retraso considerable, pues estaba previsto que las obras comenzaran en junio, y que ahora está supeditado al nuevo Gobierno de la Junta tras la salida del PSOE. En cualquier caso, los plazos que se barajan apuntan a marzo, al igual que la peatonalización de la Plaza Vargas o las obras de asfaltado del eje Corredera, plaza Esteve, Santa María y Cerrón, cuya primera de las cuatro fases también se estima para marzo o abril, pues la controvertida ‘marea negra’ no llegará hasta el verano para culminar la última parte de esta actuación, que levantó ríos de tinta entre partidos, arquitectos y los colectivos vecinales de la ciudad. No obstante, como ya avanzó el delegado de Movilidad, José Antonio Díaz, a Viva Jerez, la fecha definitiva de inicio de estas actuaciones, al afectar de lleno al centro e Intramuro, zona sensible de los recorridos procesionales, dependerá de la Semana Santa para que no interfiera, por lo que es problable se inicien a su término.
El proyecto que sí debe estar listo para entonces es la reurbanización de La Hoyanca, en la zona sur, otro de los pesos pesados del Ejecutivo de Sánchez con una inversión de 1,5 millones de euros con cargo al presupuesto municipal. La intervención contempla dos proyectos de urbanización, el primero, situado en la unidad de ejecución F05-A, está dirigido a promover la movilidad y las comunicaciones entre El Agrimensor y Ronda Muleros a través de la creación de dos nuevos viales: la prolongación de la calle Fernán Caballero, y otro de nueva creación que conectará Jorge Manrique con Ronda Muleros a través de un trazado más cómodo y accesible. El segundo proyecto, el de la unidad de ejecución F05-B, persigue mejorar la permeabilidad y la movilidad entre Federico Mayo, San Telmo y Estancia Barrera, creando para ello dos nuevos viales, y reformando otros ya existentes. Otra de las actuaciones anunciadas por el Consistorio jerezano y el “siguiente objetivo”, según dijo Sánchez, es la reordenación y urbanización del entorno de la iglesia de San Juan de los Caballeros, la cual se acometerá en dos fases. La primera contempla una inversión de 300.000 euros y que tiene como objetivo “transformar esta zona históricamente degradada y abandonada mediante un nuevo diseño unitario y accesible”.
Si la reordenación de la Plaza Belén es la joya de la corona y desde antes del verano ha pasado de ser un punto negro a cobrar vida y alcanzar su máximo apogeo estas navidades, la gran asignatura pendiente del Gobierno local del PSOE pasa por desbloquear la obra de la nueva Jefatura de la Policía Local, paralizadas prácticamente desde su llegada al Ejecutivo pese a estar al 90% de su ejecución. El proceso administrativo por la resolución del contrato mantiene la obra bloqueada. Los trabajos empezaron en 2011 con Pilar Sánchez y ya se vieron afectdos por el desvío de fondos. De otro lado, poco o nada se sabe del proyecto de la fábrica de calzado laboral de la zona sur, que debería haber abierto en marzo de 2017 y prevé la creación de 100 puestos de trabajo.