Esta semana hemos visto como ha
estallado una guerra que se venía barruntando un largo tiempo, bueno realmente es
un episodio más de un conflicto que se inició hace más de un siglo con la
declaración Balfour.
La verdad que llevo toda la semana
refrescando la historia del conflicto, para poder hacerme una
idea real de las exigencias de un bando y del otro y de las
causas que han llevado a esta situación que siempre es tan triste como es la guerra, donde
centenares de miles de familia se van a ver despojadas de su hogar.
Lo que me he encontrado es
mucho relato sesgado por una posición política clara por lo que es realmente
complicado asistir a
una fuente de información que explique de una manera
objetiva el relato completo.
También hay que señalar que el
tablero de ajedrez en el que se ha convertido
Oriente Medio es cada vez
más complicado y los
diferentes intereses que hay en la
zona son mayores, por lo que es
difícil discernir entre lo que son causas con una motivación real de un pueblo con las que están movidas por
intereses económicos o políticos de alguna de las potencias que son parte de esta guerra, pero lejos del campo de batalla.
Y es que parece que estas
son las guerras del siglo XXI donde las
grandes potencias mundiales se mojan pero no mucho, es decir mandan
financiación y armamento pero no quieren salir más allá en la foto.
Por supuesto en nuestro
país tenemos
posiciones totalmente enfrentadas entre los diferentes partidos y hemos visto como incluso
Sumar se ha metido en un charco complicado casi justificando los ataques de un grupo terrorista, escudándose en lo que ellos creen que es una
causa ‘justa’. Pero la realidad que lo que hemos visto en Israel
no se puede tolerar, aunque desgraciadamente los que vayan a
pagar las consecuencias sea un
pueblo que el único pecado que ha cometido es
quedarse callado frente a un grupo terrorista que se ha asentado entre ellos, pero que
de ningún modo se le puede identificar con todo el pueblo palestino. Desgraciadamente parece que
esto no ha hecho nada más que empezar y veremos muchas imágenes que nos helaran la sangre pero ante la que poco se puede hacer.