La Guardia Civil ha detenido en Cantabria a un hombre de 37 años y ha recuperado dos guacamayos robados en Torrelavega y un tercero procedente de un criadero ilegal de Málaga en una operación que sigue abierta ante la sospecha de que el destino de estas aves exóticas fuera el mercado negro.
La operación se puso en marcha a finales de enero, a raíz de una una denuncia presentada por un vecino de Torrelavega (Cantabria) por el robo de dos guacamayos de las pajareras que tiene instaladas en el jardín de su vivienda.
La Guardia Civil localizó las aves exóticas en el patio de acceso a una vivienda, metidas en una jaula, y detuvo a un hombre de 37 años con antecedentes que no pudo acreditar su procedencia y que está acusado de robo con fuerza y maltrato animal.
Dos de los guacamayos son los robados en Cantabria y el tercero procedía de Málaga, de un criadero ilegal dirigido por un ciudadano alemán.
Este animal fue depositado en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre del Parque de la Naturaleza de Cabárceno, donde le examinaron los veterinarios, que detectaron una anilla que estaba provocando al guacamayo una lesión por estrangulamiento en una pata, por lo que corría riesgo de perder la extremidad.
Además, se ha establecido una conexión del detenido con Portugal, un país al que no se descarta que se hayan realizado envíos de este tipo de animales exóticos, de alto valor económico.
Durante la investigación, la Guardia Civil inspeccionó numerosos lugares donde se sospechaba podían encontrarse este tipo de aves y localizó otros tres guacamayos y un loro en las localidades cántabras de Astillero, Castro Urdiales y Cartes de procedencia no acreditada.