Dos denuncias por desavenencias entre un suegro y su yerno, de un lado, y entre un arrendador y su inquilino, por otro, han llevado a la Policía Nacional a desmantelar dos plantaciones de marihuana en sendas viviendas de Marbella, en las que han intervenido en total 596 plantas.
En uno de los casos, los agentes realizaban una diligencia de comprobación en el domicilio de un denunciado por discrepancias familiares cuando descubrieron una plantación de marihuana en el sótano, por lo que detuvieron a una persona, según ha informado este miércoles la Policía en un comunicado.
La otra actuación estaba motivada por los problemas de impago de un inquilino en una vivienda alquilada donde se habían tapiado las ventanas y originado daños, lo que había levantado las sospechas del propietario.
Las pesquisas de los agentes permitieron confirmar la existencia de otra plantación de marihuana en esta vivienda.
Los agentes han logrado desmantelar los dos cultivos, en los que han intervenido 596 plantas de marihuana en distintas fases de crecimiento y 203 gramos de hachís, además de aparatos empleados en las plantaciones, como ventiladores y lámparas halógenas.
Además, han detenido en estas actuaciones a dos hombres y una mujer de nacionalidades cubana e italiana por su supuesta participación en delitos contra la salud pública.