El canciller alemán, Olaf Scholz, defendió hoy un modelo solidario europeo porque, como se ha demostrado con el plan de recuperación y resiliencia, "funciona" y es "muy positivo" para la Unión Europea (UE).
"Este programa de recuperación es una muestra de cooperación, es una muestra de solidaridad en Europa. No tiene nada que ver con cómo se afrontó la última crisis (de 2008) y vemos que funciona, incluso empezó a funcionar antes de recibir los fondos los países", dijo Scholz en una intervención en el Congreso del Partido Socialista Europeo.
Scholz se distanció así de su predecesora, Angela Merkel, que fue la gran precursora de la política de austeridad puesta en marcha en la UE durante la crisis financiera de la pasada década, aunque fue ella también quien impulsó, junto con el presidente francés, Emmanuel Macron, el histórico fondo multimillonario también conocido como NextGeneration.
Esa decisión de "luchar juntos" contra la crisis generada por el coronavirus fue "muy positiva", insistió Scholz en su turno de palabra en un panel que compartió con el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, y los primeros ministros de Portugal, Antonio Costa; Suecia, Magdalena Andersson; Finlandia, Sanna Marin, y Malta, Robert Abela.
"Lo importante es que hay una Unión que trabaja junta, que acompaña a los países en su lucha. La solidaridad funciona y este es un signo muy positivo para Europa", subrayó el nuevo canciller alemán ante su familia política.
Para el líder socialdemócrata, ahora hay que abordar una serie de cuestiones de cara al futuro, como la digitalización, la modernización de la industria para que respete el clima y la creación de empleos "decentes" en Europa.
Y es que para Scholz el empleo y las pensiones son claves para generar "cohesión social" y "respeto"
En su opinión, "hay demasiadas personas que se preocupan solo por sí mismas. La sociedad solo funcionará -insistió- si todas las personas independientemente de su empleo reciben el respeto, independientemente si son arquitectos, ingenieros o trabajan en un taller. Debemos encontrar un nuevo modelo en el que las personas se vean unas y otras como sociedad".
"Tenemos que luchar por las personas y debemos hacerlo de forma que abordemos la gran cuestión del cambio climático, para que tengamos una industria respetuosa con el clima en Europa" y se de respuesta a la necesidad de la ciudadanía de tener perspectivas para los próximos "20 o 30 años".
En este sentido, la nueva primera ministra sueca consideró que Scholz dio "en el clavo" al subrayar la importancia de que "la transición verde no deje a nadie atrás. Las personas de a pié -remarcó- deben sentir que forman parte de esta transición".
"La UE debe liderar estar transición, estar en primera línea para liderar los empleos del futuro", abogó Andersson, quien puso el ejemplo de la transformación que se está operando en ese sentido en el norte de su país y en Finlandia y expresó su deseo de que sirva de ejemplo y se extienda por "toda Europa, también al sur".
"Lo primero es la transición ecológica, lo segundo es la digitalización, en tercer lugar la cohesión social, la cuarta es la cohesión territorial y la quinta es la igualdad de género, que es importante introducirla como una política horizontal en nuestros planes de recuperación", resumió, por su parte, el presidente del Gobierno español.
En la misma línea que Sánchez, se expresó la primera ministra finlandesa, para quien la igualdad de género debe estar en la "base" para asegurarse que todos tengan "las mismas oportunidades".
Por otra parte, Marin abogó porque todos los líderes europeos defiendan y respeten el Estado de derecho y citó expresamente las situaciones "preocupantes" de Polonia y Hungría.
Tanto Abela como Costa también defendieron las políticas progresistas de sus partidos como sendas a seguir en la transformación verde y digital de Europa, y finalmente el primer ministro portugués recibió los deseos de éxito de sus colegas de cara a las elecciones legislativas a las que se enfrentará en 2022.
