Corea del Norte mostró hoy fotos de la Tierra tomadas desde capas altas de la atmósfera por una cámara instalada en el misil que lanzó en la víspera en un aparente intento de demostrar que domina la tecnología de reentrada para proyectiles balísticos.
El Rodong Sinmun, el diario oficial del Partido de los Trabajadores, publicó hoy decenas de fotos en color del lanzamiento del misil Pukguksong 2 del domingo, en las que se incluyen varias imágenes del planeta tomadas a gran altura (el proyectil alcanzó una altura máxima de 560 kilómetros).
Es la primera vez que el régimen de Kim Jong-un muestra imágenes tomadas desde una cámara adherida a uno de sus misiles.
Los expertos ya han resaltado que cinco de estas fotos publicadas en la página 3 del diario parecen haber sido tomadas cuando el misil estaba realizando su reentrada en las capas inferiores de la atmósfera.
Hasta ahora el régimen de Pyongyang nunca ha aportado datos concretos sobre el rendimiento de sus proyectiles a la hora de realizar la "reentrada atmosférica" lo que impide evaluar sus verdaderas capacidades y hace pensar que aún se encuentre en una fase temprana a la hora de dominarla.
Esta tecnología es necesaria para que la cabeza de un misil (donde se equipan una carga explosiva como, por ejemplo, una bomba atómica) soporte la vibración y el calor de la fase terminal de vuelo antes de impactar.
A la espera de que los analistas estudien al detalle las imágenes, la publicación de las mismas parece destinada a inquietar nuevamente a la comunidad internacional y especialmente a EE.UU.
A principios de año, el líder norcoreano, Kim Jong-un, advirtió de que estaba muy avanzado el desarrollo de un misil intercontinental, que pondría a tiro a EE.UU. y podría ser un importante elemento disuasorio.
Esto, unido a los insistentes test de Pyongyang pese a las duras sanciones de la ONU, ha llevado a la administración Trump a alzar la voz y a incrementar aún más la tensión en la península coreana con insinuaciones de que podría realizar un ataque preventivo.