El informe apunta a esos resultados si las tendencias se mantienen como hasta ahora y no hay “cambios significativos” en las políticas sobre propiedad intelectual, en especial por lo que respecta al intercambio de archivos por medio de descargas P2P (peer to peer, de persona a persona) y al streaming (acceso directo al contenido sin necesidad de descarga). Así, establece dos posible escenarios para 2015.
En el primero, se registrarían descensos por valor de 32.000 millones de euros ese año y una pérdida acumulada de 611.300 puestos de trabajo, asumiendo que la actividad de “piratería digital” siga creciendo con el intercambio de archivos.
El segundo escenario apunta al recorte progresivo de ingresos por el comercio minorista hasta llegar a pérdidas de hasta 56.000 millones de euros en 2015, y a pérdidas acumuladas de 1,2 millones de puestos de trabajo, en el caso de que continúe el auge del acceso a contenidos por streaming. Según esa hipótesis, se habrán sumado pérdidas de más de 240 millones de euros desde 2008.
En concreto, el estudio señala que en 2008 se perdieron 185.000 empleos e ingresos valorados en 10 millones de euros “debido a la piratería” de películas, series de televisión, música y software, pérdidas que se situaron en 1,7 millones de euros y 13.200 puestos de trabajo en el caso de España.
El documento recuerda que el peso económico de las industrias creativas en Europa en 2008 ascendió a 862.000 millones de euros (el 6,9% del valor añadido de la UE), y que daba trabajo a 14,4 millones de personas (el 6,5% del empleo de la Unión Europea).