La Luz del cineasta aragonés Carlos Saura se filtra, acaricia e inunda la cúpula del Centro Niemeyer de Avilés.
Ausente o cegadora, reveladora o tramposa, la Luz del cineasta aragonés Carlos Saura se filtra, acaricia e inunda la cúpula del Centro Niemeyer de Avilés en un recorrido entre didáctico y poético que sirve para inaugurar el complejo del arquitecto brasileño como espacio expositivo. Hasta el 11 de septiembre, esta exposición concebida por el director de Cría cuervos, reflexiona sobre cómo “a través del ojo, el ser humano se abre a la luz” e inventa los elementos que pueden sustituirlo, “como las cámaras de fotografía y cine”, según Saura.