La Residencia de mayores Cruz Roja San Fernando ha puesto en marcha recientemente una Terapia asistida con perros para sus mayores, coordinada por la Asociación Amigomio, que está formada por un equipo multidisciplinar de profesionales (veterinarios, psicólogos, terapéutas ocupacionales, pedagogos, integradores sociales, especialistas en educación canina y conducta animal, etc.) especializados en este tipo de terapia.
En estas intervenciones, el perro es incorporado como un medio o herramienta con el objetivo de aumentar la motivación, la concentración y estimulación, favoreciendo así la participación e implicación de los mayores.
Los estudios son concluyentes al confirmar el poder curativo y rehabilitador de este tipo de terapia, con beneficios de tipo físico (salud cardiovascular, mejora de la condición física general), beneficios psicológicos (efectos tranquilizadores), beneficios sociales (efecto socializador) y beneficios socioeducativos (adquisición de habilidades sociales mediante el desarrollo de la empatía).
Los perros con los que trabajan han sido cuidadosamente seleccionados por sus características y conducta. Su entrenamiento es específico para participar en este tipo de actividades como herramienta al servicio del profesional y continúo para que su adaptación al entorno de trabajo sea la idónea.
Realizan sesiones una vez por semana, con unos objetivos muy específicos, dirigidos a favorecer la sociabilización de algunos residentes a los que les cuesta más relacionarse y a la mejoría de determinadas patologías específicas.
Los resultados empiezan a ser sorprendentes puesto que además de la relación que se crea entre los residentes y los perros, aquellos trabajan en un ambiente lúdico para que el que se muestran más dispuestos y activos.