El sanluqueño Salvi está más que satisfecho tras firmar por el Cádiz. En la entidad cadista tendrá como compañero a su paisano Kike Márquez, con el que compartió vestuario en el Atlético Sanluqueño en Segunda División B siendo Pedro Buenaventura el entrenador. Ha firmado por dos temporadas y su ilusión es lograr el tan deseado ascenso a la Segunda División A.
No guarda un buen recuerdo del rival que le quitó el ascenso a la Segunda A al Cádiz hace pocos días, el Athletic de Bilbao B: “En Villanueva ganamos por 2-1 y el Bilbao caímos por 2-0. Me hicieron un penalti muy claro que no se pitó, nos expulsaron a uno en el 60 y a otro en el 80. El 1-0 llegó en el 85 y el 2-0 en el 90. Estuvimos muy cerca de pasar la primera eliminatoria”.
Asegura que “ya tengo ganar de empezar en un equipo que tiene más aspiraciones. El Cádiz tiene la exigencia de estar en la Segunda División A. Sí tengo que decir que estoy muy contento de haber pertenecido al Villanovense porque allí me trataron muy bien”. Añade que “me alegro de tener como compañero a Kike Márquez, con el que coincidí en el Atlético Sanluqueño. Sólo hemos estado juntos una temporada, con Pedro Buenaventura de entrenador. También me alegro de que esta temporadat tendré a la familia cerca”.
Deja claro que “haber fichado por el Cádiz es un sueño que se ha cumplido. Ahora hay que salir a por todas porque debemos luchar por quedar primeros, que siempre te da más opciones de subir de categoría. Lo que ocurre es que tendremos rivales que nos pondrán las cosas complicadas”.
Salvi ha afrontado una temporada muy larga por hacer disputado la fase de ascenso a la Segunda División A, al igual que el Cádiz, de ahí que haya tenido menos días de vacaciones que jugadores de otros equipos. Ya sólo piensa en amarillo y en trabajar por completar una gran temporada para que el Cádiz consiga el objetivo: Este club como mínimo debe estar en la Segunda División A, que es lo que se merece su afición”.
