La Juventud Sanluqueña, club que preside Joaquín Díaz, afronta con bastante cautela el inicio de la temporada 2020-2021, tanto con su primer equipo como con los que forman parte de la cantera. Tres jugadores de la primera plantilla, del que la entidad rojiblanca no da su identidad por privacidad, han comunicado su decisión de no iniciar la Liga en la Segunda Andaluza. El motivo, la inseguridad que supone estar inmerso en la competición liguera.
El entrenador, Víctor Moreno, tenía 35 futbolista disponibles que ahora son 32. Deja claro que “no quieren jugar por el riesgo de tener que dejar el trabajo o contagiar a su familia. Y entiendo la postura que han cogido y más tras tantos meses de espera. La Federación quiere que haya competición pero los clubes tienen miedo. Perspectivas de comenzar la competición hay pero nosotros no somos profesionales ni vivimos del fútbol y eso también hay que mirarlo. Todos estamos pendientes de que es lo que puede pasar pero hasta que no salga una vacuna el riesgo va a seguir siempre existiendo”.
Añade que “ya hay equipos que han renunciado a disputar la competición aunque han dejado un plazo hasta el 30 de septiembre. Parece que las plazas vacantes serán cubiertas por equipos de la Tercera Andaluza y que esta categoría seguirá existiendo”.
Es crítico: “No sé si esto se puede hacer eterno pero no sé si lo ideal sería esperar hasta el mes de enero. Ver como transcurre la pandemia y a partir de entonces que se decida lo que sea”.
Resalta que “si se produce un positivo en un partido esta situación afectaría a los dos equipos. Un confinamiento afectaría a muchos futbolistas que están trabajando”.
Víctor Moreno quiere ser optimista pero también realista ante una situación que no encuentra una solución desde el mes de marzo.