Los trabajadores de la planta de molturación de semilla de girasol y la de aceite embotellado Cargill en Sevilla, que ha anunciado su cierre así como los silos en Córdoba, han iniciado la negociación con la empresa bajo la premisa de que la planta sevillana es viable, según han señalado a Europa Press fuentes sindicales.
La reunión que comenzó a las 11,00 horas y se ha prolongado durante cerca de dos horas ha representado el pistoletazo de salida de la negociación, que seguirá el próximo 7 de febrero.
Durante la reunión, según han señalado las mismas fuentes, los representantes de la compañía han expuesto el informe técnico que lleva "irremediablemente" al cierre, mientras que los sindicatos han rebatido "punto por punto" el informe.
"Dicen que hay pérdidas en la molturación y en el envasado porque hay que comprar aceite a una refinería, pero ellos tienen una refinería en la planta lista para empezar a trabajar y que cerraron cuando nunca dio perdidas", han señalado..
Los 101 trabajadores tanto de Sevilla como de Córdoba, junto a sus familias, han mantenido desde primera hora de la mañana una concentración en la planta, sita en el barrio hispalense de San Jerónimo, para mostrar su rechazo ante el cierre, ya que insisten en que la planta es viable y destacan el efecto que su cierre tendría en sectores como el transporte o el campo.