La Policía Nacional ha detenido en Sevilla a una mujer de 28 años por hurtar joyas en varios domicilios en los que trabajaba como empleada del hogar, en los que sustrajo joyas por valor de 25.000 euros, ha informado en un comunicado.
Con la venta de las joyas consiguió unos 9.500 euros, ya que en los establecimientos de compra venta el precio de compra de estos metales se reduce casi un tercio de su valor en tienda.
La mayor parte de las piezas se encuentran ya fundidas al haber prescrito el tiempo de conservación legalmente establecido a los establecimientos de compraventa de metales preciosos.
La investigación se inició el pasado julio cuando los agentes se encontraban realizando un control rutinario de los libros registros de los que disponen los establecimientos de compra venta de metales preciosos.
Entre las anotaciones de dicho libro, detectaron numerosas ventas de joyas, en total 80 piezas, a nombre de una mujer, entre las que aparecían diferentes inscripciones, tales como fechas, nombres, iniciales, sin que al parecer guardaran relación con la persona que realizaba la venta.
Ante estos hechos, los agentes iniciaron una investigación para la identificación y localización de la vendedora, así como para averiguar el origen de las joyas.
Cuando constataron que trabajaba como empleada de hogar en varios domicilios, los investigadores se entrevistaron con los propietarios, quienes reconocieron haberla tenida como empleada y manifestaron que habían echado de menos algunas joyas desde que la empleada estuvo trabajando en sus hogares.
El pasado 14 de octubre los agentes detuvieron a Y.M.M. como autora de un delito de hurto y el juez decretó su ingreso en prisión provisional.