La presidenta de la Asociación de Empresarios de Artesanía y Moda Flamenca, Pilar Vera, ha indicado que el sector prevé unas ventas con motivo del inicio de la temporada de las ferias, con la Feria de Abril de Sevilla, similares a las registradas el año pasado, aunque reconoce que se están viendo mermadas por la lluvia y las inclemencias meteorológicas.
En declaraciones a Europa Press, Vera ha reconocido que la temporada está siendo "muy rara", puesto que "la lluvia y el mal tiempo nos ha hecho bastante daño, al llevarse más de un mes seguido lloviendo".
"Desde principios de año ha estado lloviendo, y el mes bueno suele ser marzo, pero el tiempo meteorológico ha ido en contra y nos ha afectado mucho", ha aseverado Vera, quien, no obstante, ha valorado que se están llevando a cabo ventas de última hora y se está registrando un repunte en los últimos días, la gente se está animando".
Vera espera que las ventas se mantengan cuando pasen los días de Feria de Abril y no cree que las ventas se hayan visto afectadas porque la feria haya sido en una fecha más adelantada "pues también son más días, por lo que una cosa se compensa con otra".
La presidenta de la asociación ha resaltado que "precisamente ahora la economía fluye y no hay nada alarmante para que la gente se eche atrás en sus compras", de forma que, en general, Vera espera que las ventas sean similares a las del año anterior "aunque algo menores por las lluvias".
Sobre las tiendas de moda flamenca 'low cost', Vera reconoce que "es una realidad con la que hay que ir conviviendo, y es otra manera de ver este sector y otra manera de vender".
En ese sentido, aunque reconoce que "se vende más en tienda física, los clientes cada vez están más familiarizados con las compras 'on line', y hay menos miedo a comprar 'on line'", algo que hacen los clientes procedentes de fuera de Andalucía y fuera de España.
Por último, en materia de tendencia, Vera ha puesto de ejemplo su empresa, que este año ofrece varias colecciones "unas con talles muy altos, otras con talles más bajos y mucha mezcla de colorido, y todo elaborado con tejidos exclusivos".
Ha puesto en valor los trajes sin mangas, con pequeños volantes en la sisa y con mucho color "que quedan muy juveniles, por lo que suponen una vuelta de tuerca a otros trajes de años atrás; son menos sobrios y más coloridos, con más frescura y más alegría".